PROBLEMA VIEJO

Los problemas que se presentaron en el Banco del Comercio no tienen nada que ver con la solidez de la Institución. Se trata de un episodio que data de más de 6 meses, cuyo origen está en algunas diferencias entre miembros integrantes de la familia Caicedo. Los accionistas mayoritarios, Douglas Botero, Jaime y Hernando Caicedo, tenían la intención de adquirir la parte de Río Paila de Alvaro Caicedo, quien la puso a la venta para atender una obligación atrasada con el Banco del Comercio. El valor de las acciones ascendía aproximadamente a 1.000 millones. Estas fueron adquiridas entonces por tres sociedades limitadas en las cuales participaban entre otros Enrique González Caycedo, Camilo Herrera, Pepé Schneider y León Posse. Como estas personas son miembros de la junta directiva del Banco del Comercio, se ha sugerido que los compradores se beneficiaron de préstamos hechos por la entidad bancaria que dirigían. Sin embargo, el Banco señala que ninguna de las compañías que participaron en la operación ha solicitado u obtenido crédito del Banco del Comercio para tal efecto. La otra parte alega que las compañías compradoras tienen capitales suscritos mínimos que difícilmente permiten una operación de esa magnitud.