Especiales Semana

VALLE DEL CAUCA

14 de mayo de 1984

EL VALLE SE ASOMA AL 2.000
Asumiendo el reto del futuro, el Valle emprende un plan para el liderazgo y el desarrollo.
Con la certeza de estar construido sobre un territorio privilegiado, con un presente lleno de satisfacciones por el comportamiento de su economía, el Valle del Cauca se empina para mirar su futuro y proyectar sus realizaciones al año 2.000.
Aunque la mayor parte de su desarrollo y la mayoría de sus programas se han hecho sobre el valle que forma el río Cauca, el departamento cuenta con una extensa franja selvática sobre la costa del Océano Pacífico, que le entrega al territorio un aire de paradoja, pero que le otorga simultáneamente la obligación de diversificarse y de pensar en el aprovechamiento de los recursos marinos.
Con 42 municipios que se distribuyen los 22 mil 140 kilómetros cuadrados de su territorio y con una población que a 1982 era de tres millones 67 mil habitantes, el departamento se presenta como una zona de marcada vocación a la agricultura con cultivos de caña de azúcar, maíz, soya, sorgo, algodón, fríjol, arroz y café, para lo cual se usa la más alta tecnología agrícola que se emplea en Colombia, pero paralelamente a esa gran producción rural ha ido creciendo la industria, con el establecimiento de multitud de empresas, con el aumento de las exportaciones y como contribución a disminuir el flagelo del desempleo.

ATRAYENDO CAPITALES
En los últimos años las fuerzas organizadas de la industria, la agricultura y el comercio del Valle se han movilizado en torno a la elaboración de estudios para el desarrollo como una manera de alentar a la inversión al capital nativo y, a la vez, buscar la llegada de inversionistas.
Fabio Rodríguez, director de la Cámara de Comercio de Cali, dijo a SEMANA que en este sentido se ha obrado y consideró que actualmente el Valle del Cauca es el departamento colombiano que posee un mayor atractivo para la industria.
El dirigente expuso como factor convincente para hacer atractiva la inversión en la región, el hecho real de que en los últimos tiempos se han promovido directa o indirectamente 15 proyectos de empresas nuevas y agregó otro argumento sustancial: el Valle del Cauca cuenta con 10 ciudades intermedias con más de 200 mil habitantes, lo que indica la proliferación de polos de desarrollo y lo que de muchas maneras, ahuyenta el fantasma de la concentración de problemas sociales y económicos en una sóla ciudad.
En ese proceso de atraer capitales, no ha sido el Valle del Cauca un Quijote infructuoso, sino que ha logrado, en este momento, reunir en su territorio a 44 empresas multinacionales, entre las que se cuentan Colgate-Palmolive, Good Year, etc.

ORGANISMOS DE APOYO
En la tarea de enriquecer al departamento, de darle alas económicas y de hacerlo más influyente en los destinos nacionales, los vallecaucanos han concretado la unión de organismos del sector privado y del público para el desarrollo de estudios y para el cumplimiento de metas concretas.
Con un sector privado muy fuerte y muy organizado, el Valle cuenta, por ejemplo, con la Cámara de Comercio Colombo-Americana, que funciona hace 22 años y que tiene como objetivo básico promover las exportaciones no tradicionales en todo el suroccidente del país, mediante la asesoría y la promoción a los pequeños y medianos industriales.
Para la generación de empleo, el Valle posee la Fundación Carvajal, que hace más de treinta años cumple funciones de tal, a través de despertar el espíritu empresarial en el campo del desarrollo.
Pero los esfuerzos no se quedan simplemente en el diseño de estrategias de industrialización ni soluciones urgentes para remediar el mal del desempleo ni tampoco en la programación de medidas de emergencia para atenuar las catástrofes, sino que el Valle del Cauca tiene entidades que están proyectando el hombre hacia el futuro, con énfasis educativos para preparar líderes en el campo empresarial.
Eso, por ejemplo, es función actual de la Cámara de Comercio donde están tratando que las universidades formen empresarios y se estudie la manera de crear microempresas como una forma de ir enfrentando el futuro.
En ese aspecto de la preparación académica, la Fundación para la Educación Superior, con 20 años de funcionamiento y oficinas en Cali, Bogotá, Medellín, y Washington, está promoviendo la profundidad de los estudios, mientras que otra entidad, el Banco de la Mujer, dirigido por Margarita Guzmán, asesora y ayuda a la creación de microempresas.
Es un presente, entonces, donde aparece la riqueza del sector agropecuario, donde crece el campo industrial y donde existen bases y organismos que están planeando la formación de líderes, la creación de empresas para un futuro que, para el Valle del Cauca, ya comenzó.

HACIA EL 2.000
En reciente visita que hizo al Valle del Cauca, el Presidente Belisario Betancur recibió los planes que para el desarrollo regional han proyectado los líderes de la comunidad, los cuales tienen que ver, en primer lugar, con la celebración de los 450 años de Cali en 1986 y, por el otro lado, con la proyección del departamento hacia el siglo XXI.
Bajo el nombre de Plan Valle 2 Mil y con el slogan de "Todos por un Valle líder", se ha lanzado este programa a largo plazo, del cual es coordinador el ex ministro antioqueño Joaquin Vallejo Arbeláez y para el cual se calcula una inversión de 80 mil millones de pesos, de los cuales el 65 por ciento saldrá del sector privado y el resto del sector público.
El plan, estudiado en los últimos quince meses por técnicos de ambos sectores de la economía y presentado al Presidente Betancur por la gobernadora Doris Eder de Zambrano, contempla metas en todos los campos de la producción y, desde luego, incluye una visión sobre lo que debe ser el comportamiento de la generación de empleo para que existan las condiciones sociales indispensables para el desarrollo.
Con dos plazos distintos, uno a 1988 y otro al año 2.003, el Plan Valle 2 Mil, incluye los siguientes objetivos y estrategias:
-En agricultura se espera un aumento del Producto Interno Bruto del cinco por ciento anual, mediante el estímulo al crecimiento de la agricultura moderna, de la agroindustria, la pesca y la silvicultura, para lo cual se incrementará la investigación, la transferencia y la difusión de tecnologías adecuadas, a la vez que el estímulo a la inversión y la promoción y diversificación de las exportaciones.
-En materia de empleo, el Plan contempla la generación de trabajo productivo y remunerativo a un ritmo superior al crecimiento de la tasa de población (para el dos mil el Valle tendrá unos cuatro millones 600 mil habitantes, con aumentos anuales del 1.7 por ciento), para que a finales de siglo el volumen de doce por ciento de desempleo haya bajado a un seis por ciento. El otorgamiento de estímulo de crédito, la asistencia técnica, la capacitación, el apoyo a programas de vivienda popular y la promoción de tecnologías intensivas de mano de obra, forman parte de las políticas previstas para este rubro del Plan.
-En el campo industrial, el Plan Valle 2 Mil espera que el departamento recupere la dinámica que mostró en los años setenta, con un crecimiento a largo plazo del 4.1 por ciento anual mediante el fomento y estímulo a la inversión, la diversificación de su estructura, el fomento a las exportaciones de bienes industriales y con proyectos que contemplan la investigación sobre nuevas líneas de productos y la creación de organismos de comercialización tanto interna como externa. Así mismo la estrategia industrial contempla su compromiso en la generación de empleo, la elevación de los actuales niveles de productividad por trabajador y el fomento y capacitación de los micro-empresarios.
-Con el mismo rigor para el diagnóstico, con idéntica seriedad en las proyecciones, en las políticas y en las estrategias, el Plan Valle 2 Mil abre capítulos para el sector comercio, el transporte, las comunicaciones, el financiero, el de servicios, el de construcción y la pesca, la mineria y la silvicultura, para completar un panorama de intenciones que hacen aparecer a este departamento como una región que, viviendo un presente de satisfacciones, quiere asumir desde ya el reto del futuro.
SHARP: ESFUERZO DE 23 AÑOS
Hace 23 ahos se inicio en Cali la que llegaría a ser con el tiempo una de las grandes industrias en la electrónica en Colombia. Con el nombre de "Candle Electronica de Colombia Ltda", se inició la empresa, sociedad de las compañías japonesas Tokio Transistor y Shibamoto Co., y por la parte colombiana el Dr. Luis Carlos Londoño Iragorri, ingeniero civil y notable industrial caucano.
La incipiente compañía dedicó sus esfuerzos a la producción de radios transistores.
Posteriormente ya hace 20 años estableció contactos con Sharp Corporation, compañía pionera en electrónica en el Japón. Sharp había desarrollado el primer radio japonés, el primer televisor japonés y por entonces lanzaba al mercado la primera calculadora electrónica de escritorio que se producía en el mundo.
El convenio con Sharp Corporation dio un vuelco total a la pequeña "Candle Electrónica de Colombia" que pasó a llamarse como hasta ahora Sharp de Colombia.
Ingenieros japoneses de la Sharp visitaron el país y prepararon los estudios de infraestructura que dieron rápido paso a la planta de televisores primero en blanco y negro y luego en color.
En 1971 y siguiendo su proceso de desarrollo, Sharp de Colombia fue la primera ensambladora de calculadoras Sharp fuera del Japón.
Desde entonces y siempre como pionera la empresa ha comercializado las calculadoras electrónicas impresora y de pantalla, desde la más pequeña de bolsillo, hasta el más sofisticado modelo de escritorio.
Posteriormente y siguiendo el convenio de fabricar o comercializar en Colombia los productos de Sharp-Japón la industria colombiana Sharp ha diversificado su producción en dos grandes líneas.
La de electrodomésticos con la fabricación de televisores y equipos de sonido y la de equipos de oficina con su variedad de modelos de calculadoras, registradoras, copiadoras y recientemente de computadores.