En el 2015 se presentaron 1.471 quejas contra taxistas

El 2015 no fue un año fácil para los taxistas. Mientras muchos ciudadanos se quejaban por la calidad del servicio que prestaban, tuvieron que enfrentar la amenaza de Uber, una aplicación que en buena parte emergió para ofrecer un servicio seguro y de calidad.

Mientras los usuarios de Uber destacan el trato personal, la comodidad de los vehículos, los de los taxis amarillos se quejan, entre otras, por el hecho de que los taxistas condicionen el destino para prestar su servicio.

La Secretaría de Movilidad señaló que hasta el 30 de noviembre recibió 1.471 quejas por el mal servicio ofrecido por taxistas, de estos, 492 reclamos corresponden a taxistas que se negaron a prestar el servicio sin causa justificada, 628 por taxímetros presuntamente alterados o cobros de tarifas con sobrecostos. Y por si fuera poco, 118 obedecieron por maltrato o intolerancia de los conductores hacia los pasajeros, las otras 233 fueron por otros asuntos.

El director de Servicios Ciudadanos de la Secretaría de Movilidad, Juan Carlos Velandia, aseguró que las quejas son remitidas a las empresas de taxis para que allí se apliquen los controles, que van desde llamados de atención verbales, hasta suspensiones temporales o la terminación del contrato. Incluso, descartó que haya impunidad en la aplicación de sanciones. “La Secretaria hace seguimiento para que efectivamente se tome un correctivo”, señaló Velandia a Caracol Radio.  

Para los taxistas, las cifras de la Secretaría demuestran que las quejas han disminuido en 35 %. “En el 2014 fueron 2.050 reclamos formales que se instauraron en la Secretaría de Movilidad, de un total de 350.000.000 millones de carreras que hacemos al año, una cifra pequeña, vamos a la baja”, dijo a Semana.com Hugo Ospina, representante de los taxistas.

Sin embargo, y más allá de las multas, es una realidad que los colombianos cada vez más dejan de usar taxi para buscar otras alternativas de transporte. Una encuesta del Centro Nacional de Consultoría realizada entre el 4 de octubre al 1 de noviembre así lo revela.

De los 2.639 usuarios encuestados, el 31 % de las personas en Bogotá, Medellín y Cali aseguraron que usan menos el taxi como medio de transporte y sólo el 3 % ha dejado de usarlo. En las tres ciudades se encontró que el principal reemplazo de los taxis son los servicios de transporte masivo de cada ciudad 10 %, seguidos por el uso de moto y vehículo propio, 5 %, y Uber, 2 %.

El 2015 no fue un año fácil para los taxistas, quienes tendrán que evolucionar en la prestación de su servicio para que los ciudadanos vuelvan a confiar en ellos. Pero sobre todo para poder competirles a las nuevas alternativas de transporte, que cada vez amenazan con arrebatarles el mercado.