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A cantar en ingles

La cercana extradición de 'Sonia' es más grave para las Farc que la de SimónTrinidad. Ella conoce a fondo los vínculos de guerrilla y narcotráfico.

14 de febrero de 2005

En los proximos dias las Farc recibirán una noticia amarga. La Corte Suprema de Justicia anunciará la decisión de autorizar que Omaira Rojas Cabrera, conocida con el alias de 'Comandante Sonia', sea extraditada a Estados Unidos. A partir de entonces los abogados de la guerrillera tendrán dos semanas para apelar de la decisión que quedará en manos del presidente Álvaro Uribe, quien seguramente no dudará en autorizarla. Esto quiere decir que antes de un mes Sonia abordará un avión de la DEA rumbo a Washington, en donde será juzgada por narcotráfico.

Aunque no es tan conocida como Simón Trinidad, y posiblemente el anuncio de su inminente extradición no tenga tantos bombos y platillos como la de ese jefe guerrillero, no cabe duda de que su captura y, ahora, su extradición han sido un duro golpe para las Farc.

No será el primer guerrillero de ese grupo que deba responder por narcotráfico. También Eugenio Vargas o 'Carlos Bolas', capturado en Surinam y trasladado a Estados Unidos en 2002, uno de los hombres de confianza del 'Negro Acacio'. Y Simón Trinidad, que aunque está acusado de narcotráfico ha tenido muy poco contacto con esa actividad y no puede aportar mucho en su confesión.

'Sonia', a diferencia de estos dos guerrilleros, sí es una ficha clave que conoce a todos los protagonistas y detalles de la relación entre la subversión y el narcotráfico. Y eso es algo que tienen muy claro las Farc. Prueba de ello fue el plan de la guerrilla descubierto a finales del año pasado con el cual pretendían rescatar a 'Sonia' de la cárcel del Buen Pastor o, en caso de no ser posible, asesinarla en ese centro de reclusión para evitar que llegara a juicio. Pero ¿qué es lo que sabe y puede decir 'Sonia' que tanto atormenta a sus camaradas de las Farc? Parte de la respuesta se encuentra en el expediente de la investigación que la Fiscalía adelantó en su contra y el cual sirvió de sustento para que una corte del Distrito de Columbia en Washington solicitara su extradición.

LA TESTIGO

En las indagatorias que 'Sonia' ha presentado desde que el Ejército y el CTI de la Fiscalía la capturaron el 9 de febrero de 2004 en Cartagena del Chairá, siempre ha negado tener algún vínculo con el narcotráfico. Escasamente ha aceptado ante los fiscales el delito de rebelión. Con lo que no contó la subversiva es que las pruebas en su contra no sólo son contundentes sino que demuestran hasta dónde estaba involucrada junto con las Farc en el negocio del narcotráfico. Una de las piezas más importantes tanto para la justicia colombiana como para la estadounidense es el testimonio de la que es considerada testigo clave en el caso.

Se trata de una antigua camarada de 'Sonia' que el primero de febrero de 2004, ocho días antes de la captura, llegó hasta la sede de la Fiscalía con una información que resultó fundamental. La mujer militó durante siete años en el frente 14, el mismo de 'Sonia', y fue quien les dio a la Fiscalía y al Ejército la ubicación exacta del lugar en donde podían capturar a 'Sonia'. Los datos que entregó facilitaron el arresto de la subversiva, aunque para esa fecha las autoridades colombianas y estadounidenses ya tenían algunos antecedentes sobre Sonia. En su declaración a la Fiscalía dijo: "...Cuando conocí a Sonia, hace más de siete años, ella era tropa común y corriente, no tenía mando pero después era comandante financiera del mismo frente y muy allegada a Fabián Ramírez" (...) "Ella le recibía la plata a la gente que va a comprar mercancía (droga), a ella le pagaban el impuesto; cuando recibía la plata se reunía con Fabián y le daba las cuentas. De esa plata salía una parte para los gastos del frente 14 y 15 que están en esa zona y para el frente 49 que también llegaba ahí", narró la mujer a las autoridades colombianas y estadounidenses.

En varias declaraciones la testigo le entregó a la Fiscalía datos exactos de los contactos nacionales y extranjeros, bienes, movimientos, rutas y una lista detallada de los miembros de las Farc que, junto con 'Sonia', estaban involucrados en el tráfico de drogas. Toda esta información, entre otros datos, fue corroborada por los fiscales especializados, quienes a lo largo del último año armaron la compleja red que durante años diseñó 'Sonia' para manejar y lavar el dinero que las Farc obtenían del narcotráfico. Estas pruebas hacen parte del expediente que la justicia estadounidense tiene en contra de la guerrillera.

A pesar de la solidez de la investigación y la contundencia de los cargos en su contra, hasta ahora 'Sonia' se ha negado a colaborar efectivamente con la justicia colombiana. Para las autoridades es claro que esa situación cambiará cuando la guerrillera llegue a Estados Unidos. A diferencia de Trinidad, que aparte de una firme convicción ideológica no tiene datos que entregar a la justicia, 'Sonia', creen los investigadores, difícilmente soportará las presiones a las que será sometida. Por ello terminará 'prendiendo el ventilador' e involucrará no sólo a muchos miembros de las Farc, sino a los narcotraficantes que se han convertido en sus socios. Por estas razones la noticia de la aprobación de la extradición de 'Sonia' sin lugar a dudas es uno de los golpes más duros que haya recibido la guerrilla.