Peligro sobre ruedas

En diciembre pasado la patineta fue el juguete más popular entre los niños. Pero en la misma medida se convirtió en uno de los que generó mayores riesgos para ellos. Sólo en la Clínica de Traumatología y Ortopedia de Bogotá se atendieron entre ocho y 10 pacientes semanales por accidentes de patineta entre diciembre y enero. Según Jorge Ernesto López, médico ortopedista de esta entidad, esa cifra aumentó durante los fines de semana. La mayoría de lesiones se presentan en niños entre 3 y 10 años y casi siempre las partes más afectadas son los miembros superiores. “Las fracturas de puño y de codos son las más frecuentes aunque también se observan casos de fractura de tobillo y rodilla”, dice López.

Sebastián Silva, de 5 años, ha sido una de estas víctimas. Una tarde fue al parque en compañía de su tía y como muchos otros niños se fue a patinar por el andén. Iba a cierta velocidad cuando de repente un hueco en el pavimento frenó en seco su patineta. Sebastián cayó al piso de frente, perdió sus dientes y sufrió una herida en la boca.

Hoy la incidencia de casos ha bajado, debido a que los niños ya empezaron su temporada escolar y a que muchos han aprendido a manejarla a punta de golpes. No obstante, los médicos han decidido subir la guardia y advertirle a la comunidad sobre los peligros de este juguete.

No se trata de archivar la patineta en el cuarto del olvido sino que se adopten las medidas de seguridad pertinentes. Así como sucede con otras actividades deportivas como montar en bicicleta, patines o en skate board, montar en patineta también requiere de mecanismos de protección. (Ver recuadro).

“La patineta tiene los mismos riesgos de caída y lesiones que estos deportes”, dice López. En algunos casos estos riesgos pueden ser aún mayores, pues la patineta tiene llantas más pequeñas y macizas. Esto provoca que ante cualquier bache o ranura en el pavimento el juguete se frene y el niño salga volando.

Según el neurólogo Fernando Hakim las complicaciones pueden ser graves si durante la caída el niño sufre un golpe en la cabeza. Dependiendo del área que se lesione, la persona pierde capacidades mentales. Si se golpea la columna puede quedar parapléjico y si el golpe es aún más violento es posible que le cause la muerte. “El problema es que con el trauma el cerebro se hincha. Como está atrapado dentro del cráneo la hinchazón impide el flujo de sangre y se produce la muerte cerebral”, explica Hakim.

Entre otros factores, López señala a la falta de conocimiento de los padres sobre este juguete como uno de los problemas que genera riesgo. “Como esa generación de padres nunca montó en estos aparatos, pensaron que era algo inocuo que no podía generar daño”. Además piensa que ante el suceso comercial de la patineta muchos se lanzaron a fabricarla sin las debidas normas de calidad. Por eso recomienda que antes de comprar el juguete de moda los padres se cercioren de que se trata de un buen ejemplar. Así mismo considera de vital importancia que los niños tengan un tipo de asesoría sobre cómo usarla y dónde.