DESDE QUE SE PRESENTO la tragedia causada por el terremoto que destruyó el eje cafetero los colombianos asumieron una actitud de abierta solidaridad para con sus paisanos en desgracia. Las ciudades del país presenciaron cómo los habitantes se desbordaban en su interés por colaborar en la medida de sus recursos para aliviar los sufrimientos de quienes perdieron sus seres queridos y sus viviendas. Y desde el comienzo mismo de los trabajos estuvo al frente de la recolección de donaciones la primera dama, Nohra Puyana de Pastrana, quien enfrentá con fortaleza el difícil momento y aplicá el refrán que sostiene que "la caridad empieza por casa".