La inestabilidad financiera del último trimestre de 2008 ha llevado a la revisión de metas e inversiones previstas para el próximo año; principalmente, por cuenta de la restricción de crédito y por el debilitamiento de las economías de nuestros principales socios comerciales.Mayor gasto público El gobierno colombiano está dispuesto a incrementar el gasto público para contrarrestar los efectos de la crisis. Así, en 2009 el mayor impulso se dará a los proyectos de infraestructura: ya fueron aprobados $18,6 billones más de lo presupuestado inicialmente en el Plan Nacional de Desarrollo. Según Carolina Rentería, directora del Departamento Nacional de Planeación (DNP), las inversiones se darán principalmente en petróleo y minas, energía, telecomunicaciones, infraestructura vial, vivienda y servicios públicos. "Tan solo en infraestructura de transporte se invertirán $3,9 billones en 2009", afirma.Lo mismo sucede en materia de logística. "El próximo año se construirán 20 plataformas logísticas que tendrán la característica de ser zonas francas permanentes, distribuidas en todo el país", explica Rentería. La Asociación Colombiana de Logística (Acolog), ha recibido con beneplácito la aprobación del Conpes de política logística.De otro lado, en 2009, la Agenda de Conectividad seguirá avanzando en su objetivo de lograr que todos los colombianos estén conectados e informados en 2019 para mejorar la inclusión social y la competitividad.Uno de los aspectos en los que debería haber avances por parte del Gobierno es en la inversión en ciencia y tecnología, componente en el que el país presenta desventajas comparativas con otros países de la región y un rezago de muchos años en los que los recursos destinados a este rubro no han superado 0,5% como participación del PIB.Oportunidades comerciales La culminación del proceso de negociación de un Acuerdo de Asociación con los 27 países de la Unión Europea (UE) y la entrada en vigencia de tratados comerciales ya firmados con los países del Triángulo Norte de Centroamérica, Chile, Canadá y los cuatro países europeos de Efta, son los asuntos más destacados en el plano del comercio internacional en 2009.En materia de negociaciones, se espera una profundización en los acuerdos comerciales con México y Perú, así como la continuación del proceso que arrancó en septiembre de 2007 para alcanzar un Acuerdo de Asociación con la UE, que en un escenario de liberación comercial sería una alternativa interesante.Las dificultades vendrán por cuenta de las menores exportaciones. A mediados de octubre, la Cámara Colombo Venezolana dio a conocer sus tradicionales pronósticos sobre los escenarios macroeconómicos en los que se moverá Venezuela en el último trimestre de 2008 y su perspectiva para 2009. De los tres escenarios, el peor y más pesimista contemplaba que el precio del petróleo, uno de los determinantes del comportamiento económico del vecino país, llegara a US$50 por barril, lo que ocurrió el pasado lunes 1º de diciembre. En este escenario se espera que el gobierno venezolano opte por reducir las importaciones antes que recortar el gasto público.Venezuela no es el único mercado con una gran incógnita. Por efectos de la recesión que vive la economía de Estados Unidos, sectores como el de confecciones, calzado, muebles y decoración han comenzado a sentir el impacto de la caída en la demanda, que podría prolongarse durante buena parte de 2009, en espera de que las medidas diseñadas para mitigar los efectos de la crisis financiera comiencen a surtir efecto.La transformación productiva Con la evolución en la agenda comercial del país y la puesta en marcha de nuevos tratados comerciales y de aquellos enfocados a atraer inversión, es necesario prever qué va a vender el país al mundo. Por ello, en 2008 se inició un ejercicio que pretende iniciar el proceso de transformación productiva del país y generar mayor valor agregado a los productos y servicios colombianos. Así, el Gobierno diseñó una estrategia enfocada a la identificación de sectores emergentes que le permitirán al país avanzar en este proceso con productos y servicios con gran potencial en el exterior.Los sectores identificados inicialmente fueron la tercerización de servicios (BPO&O, Business Process Outsourcing & Offshoring) y el software y los servicios de Tecnologías de la Información, que ya cuentan con estudios y definición de segmentos de mercados donde los productores nacionales tendrían potencial. Según el análisis que realizó la consultora McKinsey para el Gobierno, el mercado mundial de offshoring pasará de facturar US$18.000 millones en 2007 a más de US$110.000 millones en 2012; mientras que el de software se multiplicaría casi por diez en el mismo periodo, al pasar de US$27.000 millones en ventas a US$230.000 millones.Sin embargo, los sectores y el Gobierno tendrán que enfrentarse a dificultades que hoy tienen este tipo de empresas para convertirse en sectores de talla mundial, entre las que sobresalen algunas propias de ellas como su tamaño y capacidad financiera y otras transversales, como el bilingüismo, la oferta laboral y la capacitación, entre otros. También fueron identificados los sectores de turismo de salud y cosméticos, que tendrán estudios similares en los próximos meses.Todas son ideas con futuro pero deben ser parte de una política de Estado que requiere el compromiso pleno de los gobiernos y que no suceda, como en el pasado, que cada uno de ellos tenía una idea distinta para enfrentarse a la globalización. La tarea apenas comienza.