Los pasajeros del avión de Vueling procedente de Málaga (España) y que ha aterrizado en Amsterdam (Holanda) escoltado por dos cazas F-16 ante temores de un posible secuestro -luego desmentido- han comenzado ya a abandonar la aeronave, según informa la agencia holandesa ANP. El pasaje está siendo trasladado en autobuses desde la pista, en la que han permanecido unas dos horas en el interior del avión a la espera de que se aclarase la situación. Según medios holandeses, el avión habría hecho además una maniobra poco habitual en su aproximación a tierra. Las autoridades holandesas han explicado que enviaron los cazas siguiendo los protocolos habituales en estos casos. Finalmente, el avión de la compañía española aterrizó sin problemas en el aeropuerto de Schiphol, donde le esperaba un dispositivo de emergencia. Según ha dicho una mujer que se encontraba a bordo a la emisora pública Radio 1, la situación en el interior del avión era "relajada" y en ningún momento se ha vivido nada parecido a un secuestro. Otro pasajero citado por una emisora de radio ha señalado que lo único anormal que se vivió es que el avión sobrevoló en círculos el mar durante un tiempo antes de aterrizar. El vuelo 8366 de Vueling transportaba a 183 pasajeros entre Málaga (sureste de España) y Amsterdam y tenía previsto originalmente su aterrizaje para las 13.35 hora local (11.35 GMT). El aeropuerto de la ciudad holandesa ya había sido noticia el miércoles por el cierre de una de sus pistas como medida de precaución tras el hallazgo de una bomba de la Segunda Guerra Mundial durante unas obras.   EFE