Desde el último vuelo del Concorde en 2003, los viajeros frecuentes extrañan la facilidad de un viaje transatlántico supersónico en solo cuatro horas. Pero todo parece indicar que volverán y serán aún más rápidos. La compañía Virgin Galactic, del excéntrico millonario británico Richard Branson, está desarrollando el prototipo de un avión que podrá superar la velocidad de Mach 2,2, con lo que se lograría atravesar el Atlántico en tres horas y media, un 10 por ciento menos que el Concorde.Según los desarrolladores, el modelo podría estar listo para 2023 y cuenta con el apoyo de algunos gigantes de la industria aeronáutica como General Electric (turbinas) y Honeywell (aviones). Se espera que el valor del tiquete sea el mismo de su antecesor y la nave pueda llevar 50 pasajeros.