(AP/BAY ISMOYO) Ella es solo una de las cientos de víctimas que deja cada año esta infame forma de violencia de género en el país asiático y que, desgraciadamente, se ha extendido a otros continentes como Europa y América.
Atrás quedaron los días en que Asiya Bibe, una habitante de 35 años de Multan, Pakistán, no podía mirarse en el espejo. Con su cara desfigurada por un ataque con ácido, y luego de años de ser sometida a decenas de cirugías, fue fotografiada precisamente al lado de su reflejo, el 16 de marzo de este año.
Cancele en cualquier momento
(AP/BAY ISMOYO) Ella es solo una de las cientos de víctimas que deja cada año esta infame forma de violencia de género en el país asiático y que, desgraciadamente, se ha extendido a otros continentes como Europa y América.