La gira de Carlos Vives por Colombia fue todo un éxito. Sin duda uno de los momentos más emocionantes, tanto en los conciertos de Bogotá y Cartagena, fue cuando el artista invitó al público a que bailara un porro mientras que él escogía a su propia pareja dentro de las asistentes ubicadas en la primera fila. En Bogotá la elegida fue Betty Conrado Ibargüen, empleada de Aracely de Vives, mamá del cantante. Aunque él nunca había bailado con ella ni tenía planeado escogerla, Carlos ya la conocía y quedó tan impresionado con la belleza de la chocoana que hasta le prometió tenerla en cuenta para el primer video de su próximo disco.