"Tenemos excelentes relaciones con Francia, pero deben basarse en el respeto mutuo", señaló el canciller brasilero, Celso Amorín. Además señaló que aunque los objetivos de una acción puedan ser justificables, Francia no puede ignorar que "Brasil es un país soberano".El incidente inició cuando las autoridades francesas enviaron un avión supuestamente con equipo humanitario, a una región del Río Amazonas, en territorio brasileño, en donde se debía producir el rescate de la ex candidata a la presidencia, secuestrada por las Farc el 23 de febrero de 2002.El gobierno brasilero resalta que los ocupantes del avión-taxi estaban armados y por ello exigió la salida del país de la aeronave. Francia alegó que por ello no había podido liberar a Betancourt.Por su parte, Brasil señala que el avión fue enviado a su país con el único objetivo de trasladar a Raúl Reyes, uno de los principales jefes de las Farc, quien presuntamente se encuentra enfermo. Dominique de Villepin, canciller francés, niega esa versión.