Un balance positivo dejó al feria colombiana de la moda más importante de Latinoamérica, que favoreció a textileros, empresarios y confeccionistas . "Lo importante aquí es mirar cuáles son los negocios, que van a tres, seis, nueve y doce meses, y que generalmente no se transan en una feria, pues en éstas se manejan muestras pequeñas para que posteriormente se desarrollen relaciones comerciales de mucho más largo plazo y más duraderas", indicó Luis Guillermo Plata, presidente de Fondo de Promoción de Exportaciones (Proexport).También se lograron fortalecer las exportaciones de productos beneficiados con la ley de Preferencias Arancelarias Andinas (ATPA) y las relaciones con empresarios de México, Estados Unidos, Chile, Reino Unido; Ecuador y Guatemala.