A las 7:55 pm, el Departamento de Policía de Nueva York dio un parte de tranquilidad a los estadounidenses sobre el incidente presentado, horas antes, en la Catedral de San Patricio. John Miller, vocero de este organismo, afirmó que Marc Lamparello detuvo su camioneta en la Quinta Avenida y luego se dirigió al recinto católico para supuestamente tomar un atajo, después de que su vehículo se quedara sin gasolina. Puede leer: Notre Dame el dolor que unió a la humanidad El hombre fue interpelado por un agente de seguridad que le preguntó a dónde iba y le informó que no podía entrar en la catedral con esos objetos, explicó la policía."En ese momento, aparentemente la gasolina se derramó en el suelo cuando (el hombre) se daba la vuelta", dijo Miller. Sin embargo, cuando revisaron el vehículo se dieron cuenta de que el sospechoso mentía. "Miramos su vehículo. No faltaba gasolina, y lo detuvimos", precisó el oficial. Las respuestas de la persona eran "incoherentes y evasivas", por lo que la hipótesis de que quería incendiar la catedral tomó relevancia. Hasta el momento las autoridades han mantenido en reserva la identidad de esa persona y afirman ignorar cuál es su estado mental, y su motivación para intentar cometer el incendio. Le sugerimos: Río el museo incendiado que no conmovió como Notre Dame Este hecho en San Patricio puso en alarma a los organismos de control por el reciente suceso ocurrido en la Catedral de Notre Dame, en París, donde el techo y la torre aguja del se consumieron en llamas. Los neoyorquinos temían que la estructura gótica, del corazón de Manhattan, tuviera el mismo destino. La construcción de la catedral de San Patricio concluyó en 1878. Luego se le han añadido ampliaciones y fue objeto de un gran restauración que terminó en 2015. *Con información de AFP