NUEVA YORK - El estadounidense Citigroup Inc, que intenta sobrevivir a la crisis financiera global, reveló el viernes un plan que lo divide en dos unidades para separar los activos tóxicos de los sanos, tras reportar pérdidas por 8.290 millones de dólares en el cuarto trimestre. La compañía también dijo que preveía más salidas de su directorio, que perderá a Robert Rubin este año. Las acciones de Citigroup se mantenían planas a las 1650 GMT tras haber subido en la apertura de Wall Street. "Es uno de los primeros pasos hacia las noticias positivas y el fin de esta pesadilla", comentó Michael Holland, fundador de Holland & Co en Nueva York, que administra más de 4.000 millones de dólares en activos. Citigroup, que vio caer sus acciones un 87 por ciento desde el inicio del 2008, reportó 28.300 millones de dólares en amortizaciones y pérdidas crediticias, con lo que totalizó más de 92.000 millones de dólares en pérdidas por créditos en 15 meses. La pérdida del cuarto trimestre equivale a 1,72 dólares por acción, frente a un saldo negativo de 9.800 millones de dólares, o 1,99 dólares por título, de igual lapso del año anterior. Los resultados incluyeron una ganancia después de impuestos de 3.900 millones de dólares por la venta de sus operaciones de banca minorista en Alemania. DIVIDIDO Citigroup se dividirá en dos unidades operativas, una de las cuales se centrará en banca universal y la otra en corretaje y administración de activos a nivel minorista, financiamiento de consumo local, y una serie de activos que requieren manejo especial. Previsto desde hace un tiempo, esta medida es vista como un plan de "buen banco/mal banco". Los activos buenos estarán en el banco universal conocido como Citicorp, mientras que los activos en problemas irán a la unidad Citi Holdings. El grupo está analizando la venta de activos de Citi Holdings o dejarlos que maduren allí. Holland comentó que la idea de "buen banco/mal banco" ha funcionado en el pasado. En el cuarto trimestre, los ingresos del Citi cayeron un 13 por ciento, a 5.600 millones de dólares, lo que reflejó la inestabilidad de los mercados de capitales. Los ingresos de su negocio global de tarjetas de crédito disminuyeron un 27 por ciento, por la debilidad en Norteamérica. Los ingresos de banca de consumo bajaron un 22 por ciento, empujados por una caída del 47 por ciento en sus ventas. Y los egresos netos de su grupo de clientes institucionales, valores y banca llegaron a 10.600 millones de dólares, debido principalmente a pérdidas netas y amortizaciones de 7.800 millones de dólares. "Nuestros resultados continuaron siendo afectados por una inestabilidad sin precedentes en los mercados de capitales y una economía débil", dijo el presidente ejecutivo, Vikram Pandit. Matt McCormick, administrador de cartera en Bahl & Gaynor Investment Counsel, comentó: "Pienso que la gente sabía que iban a ser malos, pero estoy sorprendido de que fueran tan malos". (Reuters)