El presidente de la empresa, Juan Guillermo Londoño, aseguró que “nos falta por desinvertir algunos bienes raíces no sustantivos, algunas acciones. Este año desinvertimos en hotelería y seguridad industrial”. Quiere decir que a Colinversiones le hace falta desinvertir el 10% de sus activos no estratégicos para destinar más recursos al sector eléctrico, del orden de US$220 millones. Este año las inversiones de la compañía ascendieron a US$150 millones y para el próximo año están previstos recursos por US$50 millones para el negocio de distribución en el Valle del Cauca y el Pacífico. Las inversiones en nuevos proyectos de generación dependerán de los proyectos que resulten adjudicatarios en la subasta de energía que entrega cargo por confiabilidad, que se llevará a cabo en diciembre próximo. Incursionará en energías alternativas Colinversiones consiguió el apoyo de la U.S. Trade and Development Agency (Ustda) para desarrollar un proyecto piloto de energías alternativas entre Cartagena y Barranquilla, con inversiones en prefactibilidad que van hasta los US$2 millones. Se trata de un proyecto en donde se combinará energía solar y eólica, con una capacidad instalada de cuatro y 16 megavatios, respectivamente. Colinversiones maneja un portafolio de 45% en generación termoeléctrica y 55% hidroeléctrica, incluyendo la participación que posee sobre la Empresa de Energía del Pacífico (Epsa). Para los próximos años, las inversiones irán dirigidas al campo hidroeléctrico: la finalización de Hidromontañitas en Antioquia, de Bajo y Alto Tuluá, y Cucuana en el Tolima, además de los que resulten con miras a participar en la subasta de energía.