Una inadecuada higiene alimentaria puede causar una intoxicación severa en el organismo humano. Esto ocurre como consecuencia del consumo de alimentos contaminados con bacterias, virus o parásitos, entre otros microorganismos dañinos.

Es por esto que tanto proteínas como verduras, hortalizas, embutidos y otros alimentos, necesitan de un tiempo apropiado y de un nivel de refrigeración específico en la nevera. Sin embargo, aunque siempre las personas se enfocan en la comida, el agua también es muy importante.

Algunos alimentos pueden descomponerse en la nevera. | Foto: Getty Images

Si bien parece un acto normal e inofensivo guardar en la nevera una botella de plástico con agua del grifo para que se enfríe y poder consumirla en los días de mayor temperatura, esta acción no se recomienda en muchos casos, ya que interfiere con el electrodoméstico y el bien de la salud humana.

En muchas oportunidades, las sustancias tienden a comprimirse cuando se congelan, pero vale la pena mencionar que esto no ocurre con el agua.

Según el portal especializado Fundación Aquae, “el agua se expande de un 9 por ciento a un 10 por ciento de su volumen al congelarse. Lo curioso de todo esto es que los materiales y elementos de la naturaleza se expanden cuando se calientan y se contraen cuando se enfrían”.

Siendo esto así, el hecho de meter una botella de plástico llena de agua a la nevera, más específicamente al congelador puede hacer que esta se rompa, y si bien esto no causaría daño en el cuerpo humano, sí lo haría en el electrodoméstico, provocando su daño permanente.

De igual forma, hay que cuidar si el agua se pone de otro color al ser de grifo, pues puede tener microorganismos peligrosos, bacterias y otras sustancias, y esto sí podría causar ciertos problemas en la salud de las personas.

Ventajas y desventajas de la congelación del agua

Ventajas

  • Puede conservarla por mucho tiempo, teniendo como límite 12 meses.
  • Es efectivo y económico.
  • Este método se puede hacer con cualquier alimento.
  • Las bajas temperaturas evitan que los alimentos se degraden y los microorganismos se multipliquen.
  • No se pierden valores nutritivos, ya que se mantienen tanto los nutrientes como los minerales y vitaminas.

Desventajas

  • En ciertos alimentos, la congelación puede modificar el sabor.
  • Si un alimento se congela, al ser descongelado no se puede volver a llevar a la parte helada del refrigerador.
  • La comida congelada suele ser más cara que la fresca, ya que estos alimentos han pasado por un proceso de cocinado y están listos para consumir.