Copenhague - El documento estima que los efectos a corto plazo serán "limitados" por la calidad crediticia de los operadores nucleares europeos, aunque "ligeramente negativos" para las compañías alemanas por la decisión de su Gobierno de cerrar cautelarmente y por tres meses las siete plantas mas viejas. S&P considera además que se pueden producir pérdidas potenciales en las operaciones para reducir riesgos, porque las compañías verse obligadas a comprar o producir electricidad más cara que la producción nuclear fuera de servicio. Pero las consecuencias a plazo medio y largo podrían ser mayores, "dependiendo de qué repercusiones tenga el desastre de Japón en las políticas energéticas europeas en general y en la energía nuclear en particular", según S&P. Cualquier decisión de restringir la contribución de la energía nuclear al suministro energético europeo "podría llevar incluso a que se necesiten mayores inversiones en energía renovables, principalmente eólica e hidrológica", según el informe. Las compañías con ingresos significativos procedentes de la energía nuclear deberían entonces considerar acelerar sus planes de inversiones para sustituir la capacidad desfasada, y ello pondría presión sobre sus beneficios, señaló Andreas Kindahl, analista crediticio de la agencia. La lista de principales operadores europeos con capacidad nuclear incluye a gala Electricite de France, la alemana E.ON y la sueca Vattenfall.   (Efe)