La estrategia de avalar candidaturas por firmas se ha vuelto preocupante. Pasó de 213 movimientos ciudadanos en 2011 a 1.253 en 2018. De estos, 107 lo hacen para presentar candidatos a alcaldía: Bogotá (21), Cartagena (15), Medellín (14) y Cali (11). Las personas que se lanzan por firmas tienen la ventaja de poder hacer campaña política y publicitaria un año antes sin tener que reportar la financiación durante ese tiempo. El mecanismo desinstitucionaliza el proceso electoral pues los que recurren a las firmas buscan que los partidos adhieran después a ellos.