La semana pasada, el nuevo presidente venezolano Nicolás Maduro nombró ministra de Deportes a una famosa esgrimista de su país. La elección habría resultado apenas lógica, si no fuera porque poco después se conoció una foto que descubrió no solo sus dotes de deportista. SEMANA buscó otros casos en que política, entrenamiento y sex appeal se han unido en una sola figura.