La semana pasada, el mundo lamentó la muerte de dos figuras del siglo XX: la escritora sudafricana Nadine Gordimer y Tommy Ramone, el baterista de la banda de punk The Ramones. Equipararlos podría parecer descabellado, pero algo fundamental los une: Gordimer, que recibió al premio Nobel de Literatura en 1991, cambió la historia de su país al luchar contra el apartheid, y Ramone, famoso por su chaqueta ajustada y su capul, definió la actitud de varias generaciones hacia la política y la sociedad. Ambos rompieron preceptos, transformaron ideas y lograron mostrar que una pieza de rock puede ser tan abrumadora como una obra de la literatura universal.