El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció este sábado en la COP28 de Dubái la adhesión a un llamado internacional contra los combustibles fósiles, sin fuerza legal, lanzado en 2019 por países insulares. “Ya es evidente que no se puede vivir del petróleo”, dijo Petro, rodeado de líderes de cinco Estados insulares, en un acto celebrado durante la conferencia del clima de la ONU.

Colombia es el primer país no insular que se une al Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles, surgido en 2019 tras un llamado lanzado por archipiélagos-Estado en el Pacífico, Asia y el Caribe. Palau anunció el viernes que también se unía al texto.

Colombia es la cuarta potencia petrolera latinoamericana, y a pesar de sus esfuerzos en materia de energías renovables, más del 38 % de su matriz energética proviene del petróleo y el 25 % del gas, según la entidad independiente Global Energy Monitor.

La COP28 se realizará del 30 de noviembre al 12 de diciembre. | Foto: Jakub Porzycki/NurPhoto

El Tratado pretende imitar los pactos que se gestaron para evitar la proliferación nuclear, mediante la cancelación de cualquier proyecto que implique aumentar la capacidad de producción de combustibles fósiles. La lista actual del Tratado incluye a Vanuatu, Tuvalu, Fiyi, las Islas Salomón, Tonga, Niue, Timor Oriental, Antigua y Barbuda y Palau.

El texto cuenta con el apoyo del Parlamento Europeo, la Organización Mundial de la Salud y “100 ciudades y gobiernos subnacionales”, según el comunicado de prensa.

“Es hora de que (los países) se unan a nuestro creciente grupo (...). Cualquier otra cosa son lágrimas de cocodrilo”, sostuvo el presidente de Timor Oriental, José Ramos-Horta, citado en el comunicado.

“Es una paradoja que aquí en esta mesa esté un país como el que yo represento, porque nosotros también vivimos del petróleo”, reconoció Petro. Colombia produce cerca de un millón de barriles diarios de crudo.

Presidente Gustavo Petro. | Foto: Presidencia

“Allá en mi propia sociedad se diría: ¿cómo se le ocurre al presidente producir un suicidio económico? Y resulta que esto no es un suicidio económico; estar aquí es tratar de evitar un omnicidio, la muerte integral de todo lo existente”, aseguró.

El Gobierno colombiano ha declarado, sin embargo, recientemente que tiene la intención de seguir exportando petróleo. “La disyuntiva entre ser ambicioso o realista es falsa”, aseguró el primer ministro de Tuvalu, Kausea Natano.

El calentamiento del planeta, según los climatólogos, conllevará un aumento del nivel del mar que amenaza la existencia de islas y archipiélagos. Australia ofreció hace un mes refugio climático a 11.000 de los habitantes de Tuvalu. “Un gesto generoso de Australia... pero que marca una enorme derrota de la humanidad. A pesar de que se van a salvar vidas, una cultura va a desaparecer”, reflexionó Petro.

“Enfrentarse al cambio climático significa enfrentarse al papel de los combustibles fósiles”, añadió el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus. El Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles es en su origen una iniciativa de organizaciones no gubernamentales ecologistas y de científicos, que fue ganando fuerza en la última década.

“Quizá la discusión en el futuro gire en torno a acciones legales” contra los países o compañías petroleras, advirtió el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne.

En la COP 28 de Dubái son muchos los esfuerzos que se siguen haciendo. Un grupo de 116 países afirmó este sábado su voluntad de triplicar la capacidad instalada de energías renovables de aquí a 2030. Los países se comprometieron a “trabajar juntos” para aumentar las capacidades renovables globales (energía eólica, solar, hidroeléctrica, etc.) hasta los 11.000 gigavatios (GW), en comparación con los cerca de 3.400 GW actuales.

Ese objetivo tiene en cuenta “los diferentes puntos de partida y circunstancias nacionales” de cada país signatario, precisó el comunicado de la presidencia emiratí de la conferencia. A finales de 2022, las capacidades globales eran de 3.372 GW, según la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena), dominadas por la hidráulica (37 %) y la solar (31 %).

Los países también se comprometieron a duplicar la tasa anual de progreso en eficiencia energética hasta 2030, del 2 al 4 %. Sin embargo, estos compromisos no tienen ningún valor vinculante.

Por otro lado, más de 20 países, incluidos Estados Unidos, Francia y Emiratos Árabes Unidos, llamaron el sábado en la COP28 a triplicar la energía nuclear en el mundo hasta 2050 respecto a los niveles de 2020, para reducir la dependencia del carbón y el gas.

Petróleo | Foto: Ministerio de Minas y Energía

El anuncio lo hizo en Dubái el enviado de Estados Unidos para el clima, John Kerry, junto a varios líderes como el presidente francés, Emmanuel Macron, quienes señalaron que la energía nuclear es clave para alcanzar la neutralidad de carbono. Sin embargo, los grupos ambientalistas critican el uso de la energía nuclear como alternativa más limpia a los combustibles fósiles, destacando los posibles problemas de seguridad y la difícil eliminación de los desechos.

“No estamos argumentando ante nadie que esta vaya a ser absolutamente una alternativa radical a cualquier otra fuente de energía”, dijo Kerry. “Pero (...) la ciencia, la realidad de los hechos y la evidencia nos dicen que no se puede llegar al cero neto en 2050 sin algo de energía nuclear”, dijo. “Estas son sólo realidades científicas. No hay política involucrada en esto, no hay ideología detrás de esto”, insistió. El objetivo es triplicar la capacidad de energía nuclear de aquí a 2050 desde los niveles de 2020.

*Con información de AFP