El conglomerado petrolero Royal Dutch Shell reveló este jueves su plan de trabajo para alcanzar la huella de carbono cero al 2050, objetivo que quiere alcanzar con inversiones de entre US$5.000 millones y US$6.000 millones por año en nuevas energías.

Los recursos se destinarían para incrementar la producción de energías renovables, fomentar la fabricación de biocarburantes y tener más puntos de carga para vehículos eléctricos. En solo energías renovables, la inversión oscilará entre los US$2.000 millones y US$3.000 millones por año.