Misael Medina Quitián, maestro de una escuela de Ciudad Bolívar, en el sur de Bogotá, acaba de ganar una tutela que le da derecho a descansar durante el presente receso estudiantil. De paso evita tener que asistir a los cursos de capacitación para docentes programados por la Secretaría de Educación distrital, que en sus evaluaciones sobre desempeño escolar encontró graves carencias en los conocimientos de los alumnos en ciencias, matemáticas y lenguaje. Aunque el fallo es en primera instancia, Fecode cree que este es un precedente legal que les servirá de herramienta a sus afiliados para no asistir a los cursos. Argumenta que por salud mental los profesores necesitan 12 semanas libres. ¿12? ¿Quién en este país tiene derecho a 12 semanas de ocio? De hecho, los maestros que participen en los cursos de todas maneras dispondrán de siete semanas de vacaciones.No es una actitud ejemplar la que Fecode les transmite a maestros y alumnos, más cuando muchos educadores han asistido entusiastas a estas capacitaciones, que abarcan temas tan variados como la prevención y manejo de las dificultades de lectoescritura en la escuela primaria hasta manejo de Internet.