El alto consejero para la Reinserción, Frank Pearl, está dejando ver su casta empresarial. Logró comprometer a la empresa Argos y a la Cooperación Internacional Usaid con 6.000 millones de pesos para financiar un proyecto para cultivar ají en 47 hectáreas de la Hacienda Nápoles, que fuera de Pablo Escobar. Se beneficiarán 120 familias entre desmovilizados y víctimas.