El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón estaba hospitalizado porque se enfermó mientras hacia una gira en Antioquia la semana pasada. El, que nunca falta al trabajo, no fue a su despacho el lunes y sus asesores cancelaron toda su agenda. Pero apenas supo del atentado, se quitó los cables, se paró de la cama y el mismo se dio de alta porque no podía quedarse en el hospital en semejante día.