La Policía hizo una redada en los cuarteles del Frente Nacional, partido de la candidata de extrema derecha Marine Le Pen, quien lidera las encuestas presidenciales en Francia. La Oficina Europea de Lucha contra el Fraude sostiene que la representante usó indebidamente dineros del Parlamento Europeo para pagarle a su guardaespaldas y a su asistente personal por trabajos que realizaron para su partido político, y no para la Unión Europea. Mientras Catherine Griset, jefe de gabinete de Le Pen, fue acusada de abuso de confianza, el Frente Nacional afirma que todo es una maniobra para “alterar el curso de la campaña presidencial y hacerle daño a Marine Le Pen, en un momento en que su candidatura despega en la intención de voto”. Dado que Le Pen niega los cargos y se rehúsa a devolver los 340.000 euros de los pagos, el monto se deducirá mes a mes de su salario.