NADIE IMAGINARIA ENCONTRAR UN TAmal colombiano sobre el escritorio de un ejecutivo de Wall Street. Sin embargo hoy eso es factible gracias al ingenio de los colombianos Ricardo Soler y Juan Carlos Almanza, gerentes de mercadeo y operaciones de la firma La Huerta de Oriente. Hace un tiempo ellos decidieron empacar el apetitoso tamal, no en hoja de plátano como es lo tradicional, sino al vacío y en papel aluminio plastificado, con lo cual no necesita refrigeraciòn. Esto permitiò su exportación a Estados Unidos, donde desde diciembre pasado el suculento tamal se encuentra en las estanterías de los supermercados tratando de conquistar el paladar de los consumidores yankees. Soler y Almanza, incluso, aspiran a que los soldados del Ejército estadounidense cambien su desabrida ración de campaña por este delicioso plato nacional.