Desde 1990 el país ha visto pasar cuatro reformas tributarias y un sinnúmero de ajustes en impuestos, que en la práctica no han generado un gran cambio en los ingresos del Estado. De hecho, a pesar de tener unas tasas impositivas altas, en Colombia el recaudo tributario es bajo. Si en la reforma que propondrá el gobierno Uribe no se simplifican los trámites, las exenciones, se combate la evasión, entre otros, los esfuerzos durarán a lo sumo un año, tal y como se ha visto en las últimas reformas.