La sala de instrucción de la Corte Suprema de Justicia separó a la magistrada Cristina Lombana del proceso que sigue contra el expresidente Álvaro Uribe por soborno y manipulación de testigos. La razón es una incompatibilidad legal: la magistrada Lombana fue elegida y ejerció como miembro de la Corte Suprema de Justicia siendo mayor del Ejército. La ley señala que ningún miembro activo de la fuerza pública puede ejercer cargos en la rama judicial. Por otro lado existe una inhabilidad permanente: como militar ha sido subordinada del expresidente Uribe, que en esa condición era el comandante supremo de las Fuerzas Armadas. Lea la columna completa aquí