En la primera etapa del Tour de Francia, Nairo Quintana sufrió una caída en una jornada marcada por el nerviosismo causado por una intensa lluvia en la región cercana a Niza.

El culpable de la caída fue Lukas Pöstlberger (Bora-Hansgrohe), quien tropezó en una curva por tomarla muy cerrada. El ciclista boyacense venía cerca de su rueda y terminó damnificado. 

Nairo no se salvó, a pesar de ir bien ubicado en la cabeza del grupo, y cayó de cabeza sobre el costado derecho del cuerpo. Vale destacar que, ante la adversidad, Quintana reaccionó rápido y se levantó apenas sucedió el incidente. Así evitó perder tiempo en la caída después de 60 kilómetros de carrera. El colombiano no fue el único afectado por la dureza de esta primera jornada. Egan Bernal y Miguel Ángel López también se retrasaron por momentos del pelotón, pero lograron recuperar su lugar. Fueron varias las caídas a lo largo del día, pero el principal damnificado fue Pavel Sivakov, gregario de Egan Bernal en el Team Ineos, quien tuvo tres caídas y perdió varios minutos en la jornada. Anderey Amador, otro de los coequieros de Egan, también se vio afectado por dos tropezones.

Afortunadamente, Nairo se ubicó bien tras su recuperación y al parecer no hay consecuenncias graves por su caída. Fueron muchos los incidentes a lo largo de la carrera y Miguel Ángel López también se vio afectado. El boyacense mostró su pericia en un descenso en el que perdió el control y evitó lo que hubiera sido una grave caída.

Justo después de la pancarta de los 3 kilómetros se dio un incidente masivo en el que se cayó Rigoberto Urán, que afortunadamente no tuvo consecuencias graves.

Muchos corredores llegaron con retraso de tiempo, pero los que iban con el pelotón se les dio el mismo tiempo del ganador que fue el noruego Alexander Kristoff. Afortunadamente, los colombianos iban en el grupo de punta y no cedieron tiempo en esta peligrosa jornada.