Hay quienes dicen que Bogotá fue la que le dio el triunfo en la reelección al presidente Juan Manuel Santos. En el 2014, cuando el debate presidencial volvió a girar en torno a la paz, el mandatario perdió la primera vuelta frente a Óscar Iván Zuluaga, y las coaliciones que tuvo que sellar, una de ellas con el Polo Democrático, que durante tres periodos había administrado la capital, fue una de las claves del triunfo en la segunda vuelta.Dos años después, Bogotá no parece ser el mejor aliado del presidente en su principal política de su gobierno, poner punto final al conflicto con las FARC por la vía negociada. Santos se ha jugado prácticamente todo su capital político en la firma de la paz, y aunque los capitalinos lo respaldan, están en contra de avalar los eventuales acuerdos mediante un plebiscito.Así lo revela una reciente encuesta del Observatorio de Medios de la Universidad de La Sabana que consultó la opinión de 788 capitalinos sobre la materia, precisamente en momentos en los que el proceso de paz de La Habana atraviesa su recta final. Los resultados advierten que solo el 37 % de los bogotanos votaría a favor del plebiscito.Según la ley vigente, nada obliga al mandatario a poner en consideración del pueblo los acuerdos de paz de La Habana. Por el contrario, tiene numerosas fórmulas para que estos sean ajustados a la Constitución.Sin embargo, desde el primer día en que anunció el proceso de paz con las FARC, Santos se comprometió a que lo sometería al escrutinio de los colombianos, y a pesar de la crisis de imagen que atraviesa su gobierno, ha ratificado su promesa. El pasado viernes lo reconfirmó frente a voceros de todos los partidos políticos cuando aseguró que los colombianos serán los que le den legitimidad a los acuerdos.En lo que sí parece más que jugado el gobierno es en que el plebiscito es la fórmula más indicada para que los colombianos se pronuncien. De hecho, el año pasado el Congreso colombiano aprobó una ley para establecer las reglas de juego que debe tener el plebiscito por la paz.De momento las FARC lo rechazan, insisten en la Constituyente, pero según el propio Santos “el plebiscito es un asunto de honor”, con lo que dejó a entrever que los negociadores en La Habana no modificarán un ápice en su posición.En la encuesta de la Universidad de La Sabana, el 25 % no asistiría a las urnas y el 18 % votaría en contra. El 13 % aún no ha definido su decisión.El profesor de la facultad de Comunicación Social y líder de la encuesta, Juan David Cárdenas, explicó a Semana.com que en general los capitalinos están de acuerdo con el proceso de paz, pero tienen reservas a la hora de ir a las urnas. Esto, por las variables del tema: tierras, participación política, perdón o cultivos, y por eso tomar una posición unánime frente al plebiscito es muy complicado. No se puede encarar una decisión tan compleja con un sí o un no”.La encuesta, realizada en 18 de las 20 localidades de la capital entre marzo 24 y abril 2, estableció que el 65 % de los consultados está de acuerdo con que se adelante un proceso de paz con las FARC y el 32 % prefiere terminar el conflicto por la vía militar.Pese a que en Bogotá hay un interés generalizado por los diálogos de paz –52 % respaldan esta iniciativa, mientras que un 19 % la rechaza, aún hay un número importante de habitantes que están escépticos con la terminación del proceso.Al respecto un 53 % de los consultados se sienten pesimistas y solo un 16 % están optimistas sobre los resultados del proceso de paz, según se lee en las conclusiones del informe.Es por eso que esta encuesta puede demostrar que así como Bogotá le dio gran parte del triunfo al presidente Juan Manuel Santos, si hoy se realizara el plebiscito por la paz, la capital de la República le podría significar una derrota.Vea aquí la encuesta completa