La denuncia de Roy Barreras sobre el bombardeo de ocho menores en un operativo en Caquetá, conmocionó al país y fue el detonante para que el ministro de Defensa, Guillermo Botero, se viera obligado a abandonar su cargo. En conversación con Vicky Dávila, el senador Gustavo Petro, uno de los líderes de la oposición al gobierno de Iván Duque habló de los hechos. Lo primero que quiso dejar claro el líder de la Colombia Humana es que "los niños no son parte de una organización, así se pongan un uniforme". Para Petro la sociedad colombiana tiene que entender que estos menores no estaban en el lugar porque quisieran, sino porque eran "víctimas del reclutamiento forzado". Enfatizó en que así tuvieran un uniforme y les hubieran dado un arma, no se podían catalogar como guerrilleros porque "los habían obligado".
Sobre las declaraciones de la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez acerca de que no había manera de saber si había niños en el campamento, Petro dijo lo contrario. Aseguró que la inteligencia militar hoy es lo suficientemente avanzada para poder determinar ese tipo de cosas. También dijo que si a esto se sumaba que había por lo menos 4 denuncias en la zonas de reclutamiento forzado de menores lo que podría pensar el Estado es que posiblemente ahí estaban los niños. "Y si establecemos que ahí hay menores, pues la operación tiene que ser distinta. No digo que no se haga, claro que tiene que hacerse, pero con todo el cuidado de preservar la vida de los menores (...) Si había indicios siquiera de que había menores y de todas maneras el Ejército bombardeo, entonces el Estado cometió un crimen de guerra". Petro también afirmó que este hecho reflejaba que el gobierno "tenía una visión anacrónica de las Fuerzas Militares". Dijo que en el siglo 21 no se podía ver al Ejército simplemente como "una fuerza bruta que que entra a matar", sino que tenía que estar preparado en tecnología, pero también en humanidades como Antropología, Etnografía y otras ciencias sociales para ser más efectivos y bajo la visión del Derecho Internacional Humanitario (DIH).
Por último, el senador dijo que la salida de Guillermo Botero de la cartera de Defensa era inminente, pero que no era una victoria si se continuaba con la misma política de Estado. "Si la política de seguridad es la misma, cada vez habrá más muertos, más territorios perdidos y una sociedad cada vez más perdida. Si la política de Estado es la misma, de nada sirve que haya salido el ministro".