El ‘Gran foro mujeres colombianas, mujeres que inspiran’ reunió a más de 30 panelistas –entre artistas, empresarias, deportistas, periodistas e influenciadoras– quienes compartieron sus aprendizajes e historias de éxito. A lo largo de todo el día, se hizo evidente que, aunque se han roto techos de cristal y hoy las mujeres en Colombia están más empoderadas y tienen posiciones de liderazgo, muchas de ellas en sectores o espacios históricamente ocupados por hombres, la desigualdad salarial y el desempleo siguen siendo desafíos por superar para alcanzar una verdadera equidad de género.

Datos del Dane revelan que la brecha salarial se mantiene en 5 por ciento y la del desempleo se encuentra por encima del 7 por ciento. Paradójicamente, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), reconoce que las compañías lideradas por mujeres logran atraer y retener talento de forma efectiva, así como mejoras en términos de creatividad e innovación. María Camila León, gerente de la División Nacional de Ventas de Adecco Colombia, señaló que tres de cada cuatro empresas que han promovido la presencia de mujeres en cargos directivos han registrado un aumento de sus beneficios del 5 al 20 por ciento. Sin embargo, a pesar de estos números, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señaló que en América Latina las mujeres solo ocupan el 15 por ciento de los cargos directivos en las empresas.

En Colombia, los resultados de la tercera Encuesta de Equidad de Género de la Andi evidenciaron que el porcentaje de mujeres que integran juntas directivas, consejos directivos u órganos equivalentes disminuyeron este año en comparación con 2021, al pasar del 27,2 por ciento al 22,9 por ciento. Además, reveló que dicho comportamiento fue similar a lo sucedido en los cargos de primer nivel, al pasar de un 31,4 por ciento en 2021 a un 30,5 por ciento en 2022. Sin duda, revertir esta realidad es un verdadero reto para el sector empresarial. “Mi recomendación a las mujeres es que no vean los techos de cristal, que sigan adelante con convicción”, resalta Juanita Mesa, vicepresidenta legal de Grupo Familia, una compañía Essity.

El escenario político es más alentador. Las elecciones legislativas del pasado 13 de marzo –en las que por primera vez las mujeres obtuvieron una participación del 30 por ciento en el Congreso de la República– lo demuestran. Bibiana Aido, representante de ONU Mujeres en Colombia resaltó este logro, no sin antes precisar que “si representamos la mitad de la población, deberíamos tener la mitad de los puestos de toma de decisión, la mitad del espacio político. Creo que incluir la voz de las mujeres en la toma de decisiones públicas trae nuevas perspectivas para avanzar en la respuesta del Estado a las necesidades de la ciudadanía”.

Los deportes también se han convertido en un escenario en el que crece la representación femenina. Las selecciones de fútbol sub-17, sub-20 y mayores lograron un cupo en los mundiales y llenan de orgullo a un país que durante muchos años dudó de sus capacidades por culpa de los estereotipos. Además, mujeres como Mariana Pajón en el BMX, Yuri Alvear en el judo, Sofía Gómez en apnea, Cecilia la ‘Chechi’ Baena en el patinaje, Caterine Ibargüen en el atletismo, por nombrar algunas, han dejado el nombre de Colombia en lo más alto de los podios internacionales. Aunque es claro que se necesita mayor apoyo por parte del Estado y del sector privado para seguir impulsando el talento femenino en las distintas disciplinas.

Johana Bahamón, presidenta de la Fundación Acción Interna, destacó lo poderoso que es ver cada vez más representación femenina en la ciencia, en cargos del poder público, en la academia, liderando compañías en industrias donde antes solo se veían hombres. “Si empezamos por facilitar accesos básicos a educación, salud y empleos dignos podremos evidenciar una sociedad más justa. Esto genera esperanza de que podemos construir y no destruir”.

Espacios como el ‘Gran foro mujeres colombianas, mujeres que inspiran’ permite avanzar en la consecución de ese sueño a través de las historias poderosas de quienes participan. En palabras de María Isabel Acosta, directora de Diversidad, Equidad e Inclusión de Bancolombia, ayuda a “romper estereotipos para favorecer la igualdad y la equidad y así generar mejores condiciones y contextos donde podamos materializar nuestro compromiso con el propósito interno y con la materialización de los ODS de equidad de género, reducción de desigualdades, paz y justicia”.