Muchos ciudadanos creyeron que con el caso del ‘carrusel’ de la contratación nunca habría más escándalos en el Concejo de Bogotá. Tras escenificar tan difícil momento era de esperar que reinara la transparencia, entre otras cosas, porque todos los focos siguen puestos en esta corporación. Pero, al parecer, no ha sido así. Desde hace varios meses, allí se enfrenta en silencio otro hecho que dará que hablar: los funcionarios que ingresaron a laborar con documentación falsa. Semana.com conoció en exclusiva las pruebas de este nuevo escándalo. La principal de ellas recae sobre uno de los funcionarios que presentó certificados ficticios, un caso que es un secreto a voces en el Concejo. Se trata de Julio Hernán Páez Ospina, quien entró al cabildo en noviembre del 2012 como profesional universitario, código 219, grado tres. Según lo aseguraron varias fuentes a Semana.com, las cuales pidieron la reserva, Páez trabajó inicialmente en planeación y luego laboró en Fondo cuenta, donde habría manejado la documentación que se enviaba a la Secretaría de Hacienda sobre todos los contratos de la corporación. En su hoja de vida, Páez presentó un diploma como administrador de empresas de la Universidad Jorge Tadeo Lozano (UJTL), de Bogotá, en el que aparece supuestamente graduado en 1992. Un documento que se encuentra en poder de Semana.com. Fue entonces una queja, que llegó a la mesa directiva del cabildo, la fuente que alertó sobre las presuntas irregularidades en la autenticidad del documento. La denuncia, que en un principio llegó a través del Sistema Distrital de Quejas y Soluciones, advirtió que se debían revisar los nombramientos provisionales debido a que “fueron hechos a personas que no cumplen con los requisitos y aportaron certificaciones o documentos falsos”. La corporación entonces ofició el caso a la universidad para establecer la veracidad de esa denuncia. La sorpresa fue mayúscula: la UJTL aseguró, en una carta del pasado 15 de mayo dirigida a la dirección jurídica del Concejo, que “en el sistema académico de la universidad no se encontró registro alguno del señor Julio Hernán Páez Ospina”. La institución educativa reforzó su respuesta al confirmar que no expidió el diploma. “El documento presentado (…) para verificación no fue expedido por la universidad”, dice la misiva. Lo curioso del asunto es que antes de esa verificación el tema fue consultado al entonces director jurídico del Concejo, William Mauricio Ochoa, quien tras revisar la historia laboral de Páez, certíficó que él sí cumplía los requisitos exigidos para desempeñarse como profesional universitario “código 219, grado 03, cuyo requisito de estudio y experiencia exige título profesional y tres años de experiencia profesional”. En la comunicación, enviada el pasado 21 de marzo, Ochoa recuerda que Páez certificó la “experiencia profesional de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (1992-1995)” y un “certificado de la Cámara de Comercio de la empresa denominada Tecnología Digital Páez Ospina, de la cual es propietario y gerente”. Tras recibir esa carta, el pasado primero de mayo el denunciante solicitó a la mesa directiva del Concejo “adelantar las medidas penales, fiscales y disciplinarias”, y a los órganos de control, “tomar cartas en el asunto y sancionar a los responsables”. Según conoció Semana.com, Páez, un hombre de unos 60 años, renunció al cabildo a mediados de mayo, cuando el escándalo apenas comenzaba. Responde la presidenta del Concejo Sobre este grave caso habló la presidenta del Concejo, María Clara Name, en entrevista con este portal. Aseguró que “todas las quejas que nos han llegado por parte de las hojas de vida se han tramitado en la dirección jurídica y se han oficiado a los órganos de control pertinentes”. La presidenta dijo que “no han sido muchos casos”. “Un tema de un conductor, no tengo claro el nombre. Un comité trata esos temas y no hago parte de este”, precisó la funcionaria al confirmar que sí se han hallado irregularidades. María Clara aseguró que hay dos investigaciones disciplinarias abiertas. Estos procesos, según ella, son indagados en este momento por el control interno del Concejo. Indicó que la mesa directiva de la que hace parte no se inmiscuye en las investigaciones internas de la primera etapa, pero sí representa a la segunda instancia. “Una vez surtido ese proceso interno, se abren otros procesos con base en información de ese control”. Precisó que una de las investigaciones se abrió hace tres meses, mientras la otra hace dos. Si bien los procesos llevan varios meses y nada ha pasado, la presidenta del Concejo aseguró que las investigaciones no demorarán mucho y se realizarán según el tiempo que considera el Código Disciplinario Único. La funcionaria quiso minimizar el asunto al calificarlo como “no catastrófico”, aunque luego -contradictoriamente- opinó que estos episodios son “graves”. “Es sorprendente que ocurran (los casos) en el interior de la corporación si así se confirma”. Aunque aclaró que los nombres de los investigados están bajo reserva, reconoció ante el equipo periodístico de Semana.com que uno de los casos indagados es el de Páez, aun cuando “ya no trabaja en la corporación”. En ese sentido, se comprometió a esclarecer las irregularidades. Los órganos de control deberán pronunciarse ante estas nuevas denuncias que hoy afectan al Concejo, una entidad que no deja de dar sorpresas. Vea la respuesta de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, de Bogotá. Presione aquí para ver el documento en detalle.

Vea el diploma ficiticio que presentó Julio Hernán Páez. Presione aquí para ver el documento en detalle.