La junta se reunió en Washington el domingo y aprobó un préstamo a tres años. Como condición para recibir el rescate, Grecia implementó recortes severos al gasto público que desataron disturbios y protestas. El sábado, los mandatarios de la zona del euro aprobaron un paquete de préstamos de 100.000 millones de dólares para los próximos tres años. El rescate busca evitar que la economía griega colapse y también pretende estabilizar los mercados mundiales, sacudidos la semana pasada ante una crisis de deuda que podría extenderse a otros países europeos. Los mandatarios europeos se reúnen el domingo para acordar las condiciones de un rescate más amplio que está siendo estudiado. Su intención es tener un plan listo antes de que los mercados asiáticos abran el lunes. Algunos analistas temen que la crisis de deuda alcance a otros países de Europa occidental y frene la recuperación económica global. El presidente estadounidense Barack Obama, en tanto, seguía presionando a los líderes europeos para que generen una solución lo suficientemente sólida como para estabilizar a los mercados. La volatilidad que se vivió la semana pasada fue similar a los peores momentos de la crisis financiera de 2008. Obama llamó el domingo por teléfono a la canciller alemana Angela Merkel para hablar sobre la importancia de que las naciones de la Unión Europea "tomen medidas decididas para generar confianza en los mercados", dijo el secretario de prensa de la Casa Blanca Robert Gibbs en un comunicado. (AP)