Pablo Ross, Presidente Director Gerente de General Motors Región Andina, explicó que están planteando la alternativa de buscara nuevos horizontes como los mercados de Chile o Centroamérica, ante las dificultades que están teniendo por las recientes medidas que ha adoptado el gobierno de Venezuela. Según explicó directivo, con la nueva política automotriz de Venezuela, hay un aproximado de 250.000 unidades de capacidad de producción de vehículos en Venezuela y sólo se autorizaron 150.000 unidades ensambladas importadas. Esto implica para General Motors Región Andina que pasará de exportar 17.400 unidades que tenía previstas para este año a Venezuela, a 8.500 unidades. Pero el impacto real para la compañía es una disminución de 14.600 unidades frente a su plan de producción que realizó en noviembre pasado, cuando proyectaba ensamblar 100.000 unidades en el 2008. Así mismo, anunció que la política de importación a Venezuela también implicará una disminución importante en la contratación de personal que la compañía iba a realizar para la expansión de su planta de producción (cerca de 470 personas) en el 2008; pero dijo que “aún no esta todavía definido cuántas personas se van a contratar”. El ejecutivo también señaló las prioridades de la compañía en Venezuela. Como primera medida, definir la situación de 3.500 unidades de vehículos que se encuentran en Puerto Cabello (Venezuela) y que no tienen licencia, ya que están en tránsito desde el 8 de enero, cuando se otorgaron las licencias de importación de vehículos a este país. Además, resolver el futuro inmediato de 20.200 unidades (entre vehículos ensamblados y partes) que ya tienen autorización de embarque, pero que no tienen licencia. Frente a estos dos temas, General Motors produjo un requerimiento a las autoridades de Venezuela, quienes darán una respuesta oficial en 15 días. Por otra parte, la compañía a la expectativa de la decisión que las autoridades venezolanas tomen frente a un recurso de reconsideración que presentó para la importación de la pickup Chevrolet Luv DMAX V6, 3.2 Litros, unidades que ya estaban ensambladas y que tienen un motor superior a los 3 Litros autorizados en la resolución de importación. General Motors también confirmó que ha participado en encuentros con autoridades colombianas y las demás ensambladoras con miras a poner ideas sobre la mesa para fortalecer la industria: “Estamos analizando junto con el Sena la posibilidad de que el personal cesante de la CCA y Sofasa Renault vaya a trabajar a nuestras plantas de General Motors en España” afirmó el ejecutivo respecto a la reducción de la nomina que tendrán que realizar las demás ensambladoras. Frente al futuro de su base de proveedores en Colombia, Pablo Ross aclaró que hasta el momento el gobierno de Venezuela no ha estipulado alguna restricción para ellos, pero considera que existe una oportunidad en la medida en que ahora se presenta un incremento de la producción de ensamble en Venezuela, de 250.000 unidades. Para el consumidor, el ejecutivo dijo que, GM Colmotores con su marca Chevrolet, mantendrá precios competitivos en toda su línea de productos, no a la baja, y de hecho, aclaró que la industria automotriz no es inflacionaria y que ha reducido los precios de manera importante durante los últimos años, como consecuencia de una libre competencia. Más inversión Ross afirmó que desde hace varios años GM en la Región Andina viene realizando importantes inversiones, y Venezuela no ha sido la excepción: “las inversiones hechas en Venezuela desde hace dos años, las realizamos proyectando que el mercado se iba a cerrar y para promover la producción nacional. Por esta razón, ahora en Venezuela tenemos capacidad en planta de 140.000 unidades, en un mercado de 250.000 (vehículos ensamblados localmente)”. En Colombia, precisamente esta semana se iniciaron las operaciones de la nueva planta de pintura con una capacidad de 17,5 unidades por hora –casi el 70 % de incremento de la capacidad- y con una inversión cercana a los US$25 millones. Adicionalmente, en el 2008 GM Colmotores invertirá US$51,4 millones en maquinaria, producto y planta de producción; con miras a fortalecer el mercado en una industria que se espera mantenga su comportamiento. Del mismo modo, este año GM Colmotores invertirá US$45 millones en atención Posventa. El ejecutivo afirmó que en toda la red de concesionarios de la región continuará invirtiendo para fortalecer el servicio, y de esta manera optimizar la capacidad instalada. “Seguiremos comprometidos junto con nuestra base de proveedores y red de concesionarios para responder a las necesidades de nuestros clientes y así mismo fortalecer la competitividad de esta industria y de la economía del país” concluyó Ross. Cifras importantes: • En el 2007 Chevrolet vendió en la región andina 280.000 unidades, posicionándose como el séptimo vendedor a nivel mundial para GM, por encima de países como México, y muy cerca de las ventas que realiza en GM en Alemania. • Estas ventas representaron para la empresa US$5.870 millones, fortaleciendo a la empresa como una de las principales industrias de la región. • El año pasado, se exportaron 40.000 unidades entre los tres países de la región andina (Colombia – Ecuador y Venezuela) • GM Venezuela emplea 3.500 personas entre cargos directos e indirectos. • GM Colmotores emplea 2.300 personas entre cargos directos e indirectos.