Todo parece indicar que el movimiento ecologista Greenpeace ahora le está apuntando al gobierno de Andrés Pastrana. La razón sería la reciente oficialización del gobierno de la fundación FES. Resulta que al adueñarse de su patrimonio el gobierno se apropió de la reserva natural de La Planada en Nariño. Greenpeace considera un atropello esta acción por tratarse de una iniciativa privada creada con donaciones de organizaciones ambientalistas de todo el mundo. Ya comenzaron a inundar la embajadas de Colombia en Europa de cartas y tienen diseñado un plan para sabotear las giras presidenciales con manifestaciones en el exterior.