El hecho ocurrió en un estacionamiento de Asunción, Paraguay, y ha causado todo tipo de comentarios, algunas personas califican de irresponsable la actuación del hombre por arriesgar la vida del niño, que podría, por ejemplo, asfixiarse en el reducido espacio que no está acondicionado para transportar personas. Según el Reglamento General de Tránsito de la municipalidad de Asunción, Paraguay, los niños menores de 10 años deben ir en el asiento trasero y los menores de 3 años deben utilizar el asiento especial de seguridad, el incumplimiento de la norma constituye una falta grave. La norma, por supuesto, ni siquiera contempla la posibilidad de transportar personas en la parte de carga del automóvil, por tanto constituiría una falta gravísima.