SEMANA: ¿De qué forma se ha involucrado Usaid en programas que apoyen los liderazgos sociales en Colombia? LAWRENCE SACKS: En los casi 60 años que Usaid lleva en Colombia, hemos aprendido que para apoyar el tránsito hacia un país más pacífico, próspero e inclusivo, es necesario trabajar con los líderes sociales y defensores de derechos humanos. Ellos son la voz de las comunidades y nuestros interlocutores en las regiones. Tenemos casi 50 programas que se nutren del ejemplo de los líderes sociales y se apoyan en ellos para promover la reconciliación, el empoderamiento económico de la mujer rural y el uso sostenible de los recursos naturales, solo por mencionar algunos ejemplos. He construido relaciones con los líderes sociales. He escuchado sus historias, y no dejan de sorprenderme su coraje y valentía. Los problemas de seguridad que muchos han vivido no les han quitado la fuerza. Por el contrario, alzan su voz para defender los derechos de los suyos. Con nuestro apoyo, esperamos que esas voces se escuchen en todas las regiones de Colombia. SEMANA: ¿Cuál es el objetivo común de estos programas? L.S.: Nuestro objetivo principal es contribuir a la construcción de una paz inclusiva y duradera y a la transformación de los territorios más golpeados por la violencia. Para ello, Usaid apoya el desarrollo económico rural, la formalización y restitución de tierras, la gobernabilidad, el acceso a la justicia, la reconciliación e inclusión social, y la resiliencia comunitaria. Junto con el gobierno, la sociedad civil y el sector privado estamos trabajando por una mejor Colombia. SEMANA: ¿Por qué considera que es importante este apoyo para líderes sociales y defensores de derechos humanos? L.S.: Cuando veo a Clemencia Carabalí, Dayana Domicó, Wilson Castañeda, Marco Romero, Martha Salazar o Víctor Hugo Moreno, entre muchos otros, recuerdo la lucha admirable de Nelson Mandela o Martin Luther King, Jr. Un día espero que todo el mundo sepa los nombres de estos líderes colombianos. Para que sea así, ahora necesitamos reconocer el rol fundamental que cumplen e identificarnos con sus causas. Tenemos que acompañarlos y protegerlos, y entender que gozamos de nuestros derechos gracias a que hay mujeres y hombres defendiéndolos. Desde Usaid apoyamos la campaña Lidera la vida, como una forma de visibilizar sus causas, solidarizarnos con su trabajo y acompañarlos. Juana Alicia Ruiz, la lideresa de las tejedoras de Mampuján en los Montes de María, nos dijo que la indiferencia los lastima más que las mismas armas y nosotros estamos aquí para ayudar a amplificar su voz y acompañarles en su valioso trabajo. SEMANA: ¿Qué resultados generales podría destacar de esta labor de cooperación internacional? L.S.: Los que conocemos a Mayerlis Angarita sabemos que ella cuenta su historia sin tapujos ni velos. Por eso, me dio mucho gusto escucharla decir con ese mismo fervor: “Quien tiene el conocimiento, tiene el poder, y ustedes, al darnos la oportunidad de formarnos, nos dan el poder de trabajar por la paz, la convivencia pacífica, la reconciliación y la fuerza de nuestros territorios”. Ese es el resultado de la cooperación internacional, pero solo funciona con la voluntad y valentía de lideresas como Mayerlis y comunidades comprometidas con la transformación y el desarrollo del país. Trabajamos conjuntamente con la institucionalidad a todos los niveles. Por ejemplo, apoyamos al Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría del Pueblo, a la Procuraduría, a la Fiscalía, a la Unidad Nacional de Protección, y a los gobiernos municipales y departamentales en la implementación de mecanismos para la protección de los derechos humanos. Todas estas acciones han beneficiado de manera directa a miles de líderes sociales en Colombia. SEMANA: ¿De qué forma se pueden involucrar más actores a estas iniciativas? L.S.: Como representante de Usaid en Colombia, quiero reiterar que la protección de los defensores de derechos humanos y los líderes sociales es una de las prioridades del gobierno de Estados Unidos. Los invitamos a sumarse a nuestros esfuerzos para fortalecer la inclusión, los liderazgos sociales, la defensa de los derechos humanos, el fortalecimiento de la confianza y el tejido social, la estabilidad y la paz en Colombia. No podemos tolerar que silencien a un líder más.