Manejo de armas largas y cortas (pistola y fusil M4) combate en recintos cerrados; operaciones aeromóviles, urbanas y rurales, son algunas de las técnicas que los policías formados en la escuela Antisecuestro y Extorsión de la Policía Nacional aprenden. Pero no solo los nacionales tienen esa posibilidad. Después de tres meses de instrusión, 20 policías de Filipinas se formaron en la Escuela ubicada en Sibaté (Cundinamarca). Allí sin importar las barreras del idioma, se compenetraron con los colombianos. Los instructores nacionales de amplio reconocimiento en el mundo –sus técnicas son de exportación- en la lucha contra el secuestro y la extorsión, les trasmitieron sus conocimientos.   El general Charles Calima, es el director de inteligencia de Filipinas. El oficial luego que sus hombres terminaron el curso, dijo que su nación enfrenta un flagelo similar al de Colombia. Su misión, según aseguró, es convertir a su país en un lugar seguro.   “En lo que tiene que ver con el secuestro tenemos guerrilleros comunistas que lo practican. Hay extorsión de dinero a negociantes y profesionales. Ellos dicen que esto solo es una forma de impuesto revolucionario, pero no es más que un acto criminal de extorsión. En el sur de Filipinas, también tenemos rebeldes musulmanes quienes también recurren a la extorsión con las compañías y amenazan con quemar fábricas y equipos. Han plantado algunas bombas a veces para forzar a la gente a que les den dinero”, aseguró. Calima dijo que conoció de los avances del país contra la extorsión y el secuestro, por lo que la intención es que en filipinas se puedan tener resultados similares, luego del entrenamiento recibido. Aseguró que luchar en su nación contra el secuestro, no es una tarea fácil y es por eso que deben estar muy bien entrenados. “En lo que tiene que ver con el secuestro, los grupos fuera de la ley, secuestran gente a cambio de grandes cantidades de dinero por el rescate. Se llevan los rehenes a sus comunidades. Allí andan mezclados con niños y con mujeres, entonces esto dificulta el rescate. En muchos casos las víctimas se utilizan como escudos humanos”, dijo el oficial y al tiempo señaló que los 20 policías llegarán a su país a entrenar a sus compañeros con las técnicas aprendidas en Colombia. Filipinas planea tener más adelante un policía adjunto en Colombia y así poder ahondar más en los conocimientos desarrollados a partir del programa de cooperación, desarrollado desde la embajada de los Estados Unidos y su Agencia Antiterrorista Americana (ATA). Para el comandante del Gaula de la Policía colombiana, general Humberto Guatibonza, el aporte a la formación de los filipinos se dio con la única intención de apoyar a un país amigo que requiere aprender a combatir sus problemáticas y que desde la escuela Antisecuestro y Extorsión -única en el mundo de su tipo- donde se entrenan los miembros del Gaula, se les brindó toda la capacitación necesaria. “Esta labor ha sido expresamente de colaboración con una hermana nación que solicitó nuestra ayuda de acuerdo a la experiencia que hemos adquirido a los largo de estos años en la lucha contra estos flagelos. Ellos quedaron sorprendidos de nuestra manera de trabajar y eso demuestra una vez más, como el Gaula de la Policía Nacional, es un grupo élite reconocido en el mundo. Tanto así, que esto es una muestra de que seguimos exportando nuestra experiencia a otras naciones del mundo, que reconocen el éxito y profesionalismo de nuestros policías”, indicó Guatibonza.   Uno de los oficiales al mando de los policías capacitados en Colombia, es el capitán Antoni Lozada, subcomandante de las Fuerzas de Acción Especial de Filipinas. El uniformado indicó que los dos países tienen problemáticas muy similares, razón por la cual ellos vinieron a prender nuevas técnicas contra la delincuencia.   “Básicamente puedo decir que las Filipina y Colombia tienen la misma cantidad de problema con respecto al secuestro. En la parte sur de Filipinas el secuestro es algo rampante. No solamente son los locales los que están siendo secuestrados, sino también gente en el mundo”, dijo el oficial, y es precisamente a esa parte del país donde serán enviados los 20 policías formados por el Gaula. Otro de los miembros de la Policía de Filipinas formado en aulas colombianas el capitán Salvador Trono, director y jefe de planeación del Grupo de operaciones Antisecuestro de ese país aseguró que en el sur de esa nación los delincuentes son difíciles de atacar porque se encuentran armados, completamente equipados, están totalmente entrenados y conocen su terreno. “El entrenamiento es parte del programa de ATA de la embajada de los Estados Unidos y Filipinas es uno de los beneficiarios en el mundo de este programa y como Filipinas está presentado problemas con el secuestro, entonces en coordinación con la Policía colombiana y la de Filipinas, la embajada de Estados Unidos, envía delegados para que sean entrenados en Colombia”, explicó.