Colombia es el segundo país más biodiverso del mundo y el primero en especies únicas. Pero, además, es el territorio con más frailejones del mundo. Sus páramos proveen el 70 por ciento del agua potable en Colombia y se convirtieron en santuarios naturales.

Colgate-Palmolive Colombia, una de las marcas líderes en el país en temas de sostenibilidad, busca contribuir en la promoción del cuidado ambiental como eje central para combatir los efectos de la crisis climática.

Este año, uno de sus mayores logros fue finalizar su campaña Frailecoins, la cual recaudó 1.000 pesos por cada una de 125.000 unidades vendidas de su línea Colgate Natural Extracts entre el 15 de enero y el 28 de febrero de 2023. El dinero será utilizado para apoyar la protección del santuario de Flora y Fauna Guanentá Alto Río Fonce.

Este santuario forma parte del cinturón de páramos y bosque andino y cuenta con más de 80 lagunas. Es uno de los páramos más importantes y diversos. Alberga más de 23 variedades de frailejones en las cuencas de los ríos Sogamoso, Chicamocha, Fonce y Suárez.

“Entendemos la importancia de estos ecosistemas en la producción del agua que consume todo el país y en la preservación de cientos de especies que allí habitan. Seguiremos promoviendo estas iniciativas”, afirmó Juliana Holguín, vicepresidente de Mercadeo de Colgate-Palmolive.

Desde Colgate se ha logrado implementar procesos para el uso responsable del agua, los cuales han reducido en un 40 por ciento el consumo en su planta de producción en los últimos 5 años.

La iniciativa Frailecoins ratifica el compromiso social y ambiental que debe existir desde las organizaciones. A lo largo de sus ocho décadas en el país, Colgate ha liderado diversas acciones en pro del cuidado del medio ambiente, desde la transición a producciones que incluyen plástico reciclado y reciclable, siendo la primera subsidiaria (Colombia) a nivel mundial en hacer la transición de todo su portafolio de tubos de crema dental a material ciento por ciento reciclable.

Lea también: Orgullo colombiano: así fue como el amor por los frailejones llevó a este biólogo a dirigir el Jardín Botánico de Nueva York