Hace exactamente un año, la sección tercera de ese alto tribunal le había prohibido a Patarroyo hacer pruebas con los animales con el fin de protegerlos de cualquier maltrato. Pero, la semana pasada, los jueces de la sección cuarta tumbaron el fallo de sus colegas y le devolvieron la posibilidad de hacer experimentos con los monos para que continúe sus investigaciones sobre la vacuna contra la malaria. El asunto quedó en tablas, y ahora la decisión final pasa a manos de la sección quinta del Consejo, que tendrá que dirimir el conflicto de sus compañeros. En las altas cortes últimamente se ha debatido sobre circos, toros y primates. Pocas veces habían pasado tantos animales por la Justicia.