Según las cifras actualizadas esta semana por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han registrado 13.042 casos de ébola y 4.818 muertes desde que el pasado diciembre falleciera el primer niño a causa del virus. Pero estos números incluyen todos los casos probables, sospechosos y confirmados y son susceptibles de cambiar a medida que se disponga de más información. La cifra ha caído ligeramente en la última semana porque los números fluctúan según los datos disponibles, y a medida que los casos probables y sospechosos se confirman o se descartan. Los expertos advierten que el número infectados y muertos está probablemente muy por debajo de las cifras reales, ya que mucha gente puede ser reacia a buscar tratamiento y los funcionarios están sobrepasados por los esfuerzos por controlar la epidemia como para registrar cada caso. La inmensa mayoría de los pacientes estáen Guinea, Sierra Leona y Liberia. Los casos y muertes se registran solo días después de que los pacientes se vuelvan sintomáticos o fallezcan, lo que complica tener un conocimiento a tiempo real de la enfermedad. "Definitivamente estamos obteniendo una imagen tardía de la epidemia", dijo Sebastian Funk, profesor de enfermedades infecciosas en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, Inglaterra. "Es difícil decir si estamos llegando a un punto de inflexión o si estaremos en un escenario apocalíptico. Vamos un poco en ambas direcciones en este momento". Según la OMS, se necesitan 4.707 camas más en centros de tratamiento de ébola de África occidental; por el momento, solo el 22 % de la cantidad requerida están operativas. La agencia estima que se necesitan otras 2.685 camas en clínicas básicas contra la enfermedad, donde se proporciona un tratamiento mínimo y la gente está en su mayoría aislada mientras espera a los resultados. Ahora, solo el 4 % de las plazas de estas clínicas comunitarias están disponibles. Dada la incertidumbre en torno al número de casos, Funk dice que datos como la ocupación de camas son un buen indicio de la evolución del brote. "Necesitamos ver que esos números bajan durante varias semanas para estar seguros de que es una tendencia real", dijo. "Si los hospitales dejan de estar llenos será un buen indicador indirecto de que las cosas están avanzando en la dirección correcta". Fueron necesarios dos meses para que Gran Bretaña construyese y abriese su primer centro de tratamiento del ébola en Sierra Leona esta semana, una instalación con 80 camas y una docena de plazas adicionales reservadas para sanitarios infectados. La cínica Kerry Town, próxima a la capital Freetown, es el primero de los seis centros que los británicos levantarán en Sierra Leona. Incluye un centro de recuperación, zona para ambulancias, laboratorio, farmacia y unidades de descontaminación. En aproximadamente el plazo que Gran Bretaña empleó en construir la clínica, Sierra Leona registró más de 3.500 casos de la enfermedad. La OMS dice que 546 trabajadores sanitarios se han contagiado de ébola, de los cuales 310 fallecieron. Dado que el ébola se transmite por el contacto directo con los fluidos de un paciente, los sanitarios tienen un riesgo alto de contraerlo. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos recomiendan que los médicos y auxiliares no expongan nada de piel mientras tratan al paciente. Todavía hay un estadounidense hospitalizado por ébola, el medico Craig Spencer, en Nueva York. El facultativo, que trabajó con Médicos Sin Fronteras en Guinea, sigue mostrando mejoría, permanece aislado y su condición es estable.