En medio de la tensión mundial propia de la guerra que se libra en Europa por cuenta de la ocupación de Rusia a Ucrania, y los intentos de algunos otros estados de la región por buscar formalizar su adhesión a la Otan en medio del escenario de incertidumbre, Finlandia ha vuelto a ser noticia, debido a su proceso para ser parte del Tratado del Atlántico Norte.

Precisamente, el pasado martes, en medio de un acto público, su ministro de Relaciones Exteriores, Pekka Haavisto, sorprendió con un pronunciamiento derivado de los múltiples obstáculos que ha presentado su candidatura conjunta con Suecia, y esto surge, precisamente, de su opción por intentar seguir el proceso en ‘solitario’; es decir, sin ir en llave con los intereses que comparte con Estocolmo.

Si bien el diplomático reiteró que la intención es seguir con una adhesión conjunta de los países nórdicos, los obstáculos que a esa realidad han impuesto países como Turquía, han obligado a que se tenga que poner sobre la mesa también la opción de intentarlo en solitario, en caso de que, a largo plazo, el ir ‘en llave’ con Suecia suponga un impedimento para alcanzar el objetivo.

El canciller de Finlandia, Pekka Haavisto, afirmó que el país no descarta intentar llegar a la Otan en solitario; sin su llave Suecia. | Foto: AP Foto/Virginia Mayo

El pronunciamiento que generó revuelo en Europa fue realizado el pasado martes por Pekka Haavisto a la televisión pública de su país; no obstante, es importante precisar que el diplomático también advirtió que esa no es una decisión tomada, y que “es demasiado pronto para tomar una posición”.

Protestas que no facilitan el objetivo

Si bien Turquía ha sido uno de los países que se ha opuesto desde la misma Otan a la adhesión de Suecia, recientes hechos han reafirmado aún más esa posición, respondiendo a un inconformismo derivado de las mismas acciones y actitudes que ha presentado ese país y sus ciudadanos.

Así, por ejemplo, medios internacionales han referido que el pasado fin de semana se presentó una protesta protagonizada por un extremista sueco que atentó contra las creencias de gran parte de la población turca, al haber incinerado una copia del Corán en inmediaciones de la embajada turca en Estocolmo, hecho que inmediatamente despertó la inconformidad y el pronunciamiento de parte de la población de ese país.

Frente al tema de la adhesión sueca, Turquía se ha mostrado recurrentemente en oposición, planteando obstáculos directos e indirectos a que se avance con el proceso.

En ese sentido, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se pronunció el pasado 23 de enero de 2023 para sentenciar que, tras lo ocurrido con el manifestante citado, Estocolmo no contará con el respaldo de Ankara para la adhesión a la Otan, recordando además que ese no ha sido el único escenario que despierta la indignación.

Así, en su pronunciamiento, el ministro de Exteriores de Finlandia ha reconocido que las protestas se han convertido en una posible zancadilla a los intereses nacionales de su país y de Suecia en procura de la adhesión al organismo internacional.

“Están jugando con la seguridad de Finlandia y Suecia”, advirtió el ministro de Finlandia en declaraciones recogidas por la Agencia AFP, en las que también se manifestó consciente que el eventual visto bueno de Ankara será demorado, al menos hasta que se surtan elecciones en ese país, debido a las implicaciones que podría conllevar en las urnas una u otra decisión que se adopte, más aún, siendo un proceso en el que Erdogan se jugará su reelección.

Erdogan se juega su reelección en mayo de 2023. | Foto: Reuters / Autor: Cagla Gurdgogan

La eventual apuesta a ir en un proceso individual, advertida ahora por Finlandia, va en la senda de que, hasta la fecha, Turquía no ha mostrado objeción alguna a su adhesión; situación contraria a la visión frente a Estocolmo, pues Ankara señala a ese país como un refugio de “terroristas kurdos”.

¿Por qué en necesario el visto bueno de Turquía?

En medio de la legislación interna de la Organización del Atlántico Norte, Otan, se establece que para la adhesión de nuevos miembros, los estados candidatos deberán contar con el visto bueno de los otros 30 miembros de la Organización, por lo que una oposición por parte de alguno de los estados puede alcanzar incluso la categoría o alcances de un derecho a veto.

Precisamente, en virtud de ello, Suecia y Finlandia han venido agotando escenarios de interlocución con Ankara, no obstante, debido a lo que podría jugarse políticamente al interior de su país, Erdogan ha impuesto una serie de dilaciones a esos encuentros.

Por ejemplo, esta semana, Turquía anunció que aplazó indefinidamente una reunión que estaba programada para inicio de febrero, en la que Suecia y Finlandia intentarían limar las asperezas, y eliminar las eventuales objeciones.

Turquía señala a Suecia de alojar a terroristas kurdos. | Foto: Libre de derechos

La candidatura de Suecia y Finlandia para adherirse a la Otan un tema de viene discutiendo en el seno de la Organización desde el pasado mes de mayo de 2022, cuando se presentó la candidatura conjunta; un hecho que tomó mayor relevancia aún en medio del contexto de la invasión rusa a Ucrania, debido a que lo ocurrido puede verse a su vez como una eventual amenaza a la seguridad de estos dos países nórdicos, en caso de que el Kremlin centre sus proyecciones expansionistas sobre sus territorios.

En medio de la crisis derivada del contexto descrito, también se ha conocido un pronunciamiento por parte del primer ministro sueco Ulf Kristersson, quien exhortó a su población a mantenerse en calma, manifestándose confiado en que pronto pueda “reanudar un diálogo de trabajo con Turquía”.

*Con información de AFP