El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos mostró su pesar por la “atroz” muerte del periodista Dom Phillips y el indigenista brasileño Bruno Araújo, desaparecidos en la Amazonia de Brasil, y exigió una investigación “imparcial”.

“Este brutal acto de violencia es atroz y hacemos un llamamiento a las autoridades del Estado para que las investigaciones sean imparciales, transparentes y exhaustivas, y se otorgue reparación a los familiares de las víctimas”, señaló en un comunicado la portavoz del organismo, Ravina Shamdasani.

Más allá de la condena a estas muertes, Naciones Unidas lamentó que “los ataques y amenazas” contra defensores de los Derechos Humanos y de los indígenas sean “persistentes” en la nación sudamericana.

Es por esto que desde el organismo hizo un llamado a las autoridades brasileñas para “incrementar sus esfuerzos” a la hora de proteger a los activistas de toda aquella forma de “violencia y discriminación” tanto por actores estatales como no estatales.

En la misma línea, Shamdasani pidió “prevenir y proteger” los territorios indígenas de las “incursiones de actores ilegales”, reforzando para este fin a los organismos gubernamentales encargados de la protección de los indígenas y el medioambiente.

Si bien la portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos no los mencionó explícitamente, Shamdasani se estaría refiriendo tanto al Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (Ibama) como a la Fundación Nacional del Indio (Funai), según apunta el portal de noticias UOL.

Estas demandas de Naciones Unidas chocan con el discurso del Gobierno brasileño, que en palabras de su embajador ante el Consejo de Derechos Humanos, Tovar da Silva Nunes, las autoridades del país combaten las acciones ilegales en las reservas indígenas.

Con este nuevo comunicado, la ONU se manifestó al respecto de la desaparición de Phillips y Araújo por tercera vez en apenas una semana, incluyendo en sus discursos críticas a la gestión de esta tragedia por parte del presidente del país, Jair Bolsonaro.

De hecho, Naciones Unidas ya criticó la semana pasada la respuesta “extremadamente lenta” de las autoridades brasileñas durante las primeras horas de la desaparición del indigenista y el periodista británico.

La Policía Federal encontró este miércoles dos cuerpos en la zona de la desaparición, conocida por ser una de las más inaccesibles de la región por alojar la mayor concentración de pueblos indígenas sin contactar y ser escenario de una de las mayores rutas de circulación de la cocaína y de otras materias primas extraídas ilegalmente.

El avión con los restos llegará este jueves a la capital, Brasilia, donde el Instituto Nacional de Criminalística analizará los cuerpos e intentará determinar si corresponden a Phillips y Araújo, además de averiguar la causa de la muerte.

La Unión de Pueblos Indígenas del Valle de Javarí (Univaja), cuyos miembros participaron activamente en las búsquedas, calificó de “crimen político” el asesinato al considerar que eran “defensores de los derechos humanos” Foto: Joao LAET / AFP | Foto: AFP or licensors

Uno de los primeros sospechosos que detuvo la Policía, Amarildo da Costa Oliveira, alias Pelado, confirmó a los agentes el lugar en el que había enterrado los cuerpos, además de esconder la embarcación en la que viajaban.

El caso de la desaparición del periodista y el indigenista se prolongaba desde el pasado 5 de junio, cuando fueron vistos por última vez en la comunidad de São Rafael, dentro de las tierras indígenas del Valle del Yavarí.

Otras reacciones

La Unión de Pueblos Indígenas del Valle de Javarí (Univaja), cuyos miembros participaron activamente en las búsquedas, calificó de “crimen político” el asesinato al considerar que eran “defensores de los derechos humanos”. “Sabemos que forman parte de un grupo mayor”, agregó.

La Asociación Brasileña de Periodismo de Investigación (Abraji) afirmó que la labor en los últimos años de periodistas y ambientalistas ha servido para mostrar los “récords” de los crímenes ambientales en la Amazonia, así como de los asesinatos de activistas.

En 2020 se cometieron 20 asesinatos de activistas ligados a la causa ambiental en Brasil, según Greenpeace.

“En paralelo, el presidente y sus aliados se convirtieron en protagonistas de los ataques a la prensa”, señaló la Abraji.

En declaraciones a la AFP en Londres, Jonathan Watts, colega de Phillips en The Guardian, dijo esperar que estos “monstruosos” asesinatos alienten, y no disuadan, a los medios de comunicación a proseguir su trabajo sobre los crímenes medioambientales.

“Con el corazón partido”

El jefe de la PF en el estado de Amazonas (noroeste), Eduardo Alexandre Fontes, aseguró que es muy probable que los restos mortales “correspondan a Phillips y Pereira”, aunque para confirmarlo deben someterlos a pruebas de identificación.

Los resultados saldrán la semana que viene, según la prensa local.

La familia de Phillips en el Reino Unido dijo tener “el corazón partido” por las muertes y agradeció a los participantes de las búsquedas, “especialmente a los indígenas”.

La investigación continúa para determinar el papel exacto que tuvieron los dos detenidos, que son hermanos, y sus eventuales cómplices. La prensa local afirma que habría otros tres sospechosos, entre ellos un posible ordenante del crimen.

*Con información de Europa Press y la AFP.