Las decisiones de la justicia son, recurrentemente, objeto de críticas, pero en este caso el rechazo fue general, pues se trató de un hecho de extrema violencia intrafamiliar que derivó en un intento de feminicidio, aún así un juez de control de garantías tomó la determinación de conceder la detención domiciliaria al presunto responsable. La Fiscalía apeló la decisión y este miércoles otro juez la confirmó, en otras palabras, el hombre señalado de quemar con thinner a su esposa, seguirá en la casa por cárcel.

La decisión, en segunda instancia, insiste en las mismas condiciones que expuso el juez de control de garantías para tomar la decisión de enviar a la casa por cárcel al presunto responsable de atacar a su pareja sentimental. “La selección de la medida de detención en residencia obedeció a la acreditación, por la defensa de esta persona, de un ámbito domiciliario alejado y diferente al de la víctima, que permitía neutralizar suficientemente el riesgo detectado… En esas condiciones, el sistema judicial no podía optar por medidas más intensas”, dijo el juez de primera instancia.

El reproche, por recordarle al juez, no salió de los medios de comunicación, sino de la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, al criticar la decisión y advertir que se trataba de un grave caso de impunidad en un escenario que puso en riesgo de muerte a una mujer, la víctima de este proceso.

“Cómo es posible que un caso de feminicidio con plena evidencia de un hombre que quema a su pareja y la tiene entre la vida y la muerte, y el juez da prisión domiciliaría al victimario. ¡La impunidad incita a más violencia e inseguridad! ¿Qué espera? Que la reciba en casa si se salva?”, dijo a través de sus redes sociales la mandataria.

Expertos en derecho penal advirtieron que las críticas a la decisión de la juez son injustificadas, por cuanto no en todos los casos la regla general debe ser la detención en centro carcelario, enviar a la cárcel a los procesados, cuando existen otras medidas de aseguramiento que garantizan la protección de las víctimas y del proceso, entre ellas la detención domiciliaria.

Justamente la defensa del hombre capturado, insistió que su cliente estará en un casa diferente a la que compartía con la víctima, razón suficiente para garantizar que no se convertirá en un peligro para su expareja una vez salga de la clínica. “Explícitamente se indicó que se estaba ante un evento de grave violencia de género; que, a pesar de que no había antecedentes de violencia o delincuencia por parte del señor Rivera Triana, su libertad representaba riesgo para la víctima por su convivencia; y que, por ello, debía detenérsele”, señaló el juez en su respuesta.

Con la decisión de segunda instancia, de mantener la detención domiciliaria en contra del presunto responsable de quemar con thinner a su pareja, el proceso no termina. Fuentes de la Fiscalía aseguraron que ahora presentarán el escrito de acusación, para tratar de demostrar en juicio la responsabilidad y obtener una condena ejemplar en su contra.

Aún con los argumentos del juez, que tomó la determinación de enviar a la casa por cárcel al presunto responsable, el reproche de la sociedad fue contundente, al comparar otros casos que terminan en detenciones arbitrarias, pero que en esta oportunidad y en un delito tan grave terminó, con un beneficio para el principal señalado.