A las 6 en punto de la mañana, ¿qué estará opinando María Isabel hoy miércoles 24 de abril en SEMANA? Pues la opinión gira en torno a la decisión de la Procuraduría de extender por tres meses más, es decir, ya en total por seis meses, la suspensión de su cargo al canciller Álvaro Leyva.

La razón es que la Procuraduría considera que las fallas cometidas en relación con la decisión de declarar desierta la licitación de los pasaportes, continúan cometiéndose en la actualidad. El canciller Leyva está siendo objeto de un juicio disciplinario por esos hechos.

Álvaro Leyva, canciller suspendido. | Foto: Juan Carlos Sierra

Concretamente, se le investiga por la posibilidad que Leyva haya violado los principios de contratación estatal con la delicada consecuencia de que se afecta o que se termine afectando la seguridad jurídica de la contratación con el Estado al declararse desierta la Licitación 001 de 2023 sin que estuviera respaldado por fundamentos técnicos que lo justificaran.

También se le acusa de haber abusado de la declaratoria de urgencia manifiesta para volver a contratar con Thomas Greg & Sons, como los bobos, para la elaboración de pasaportes que previamente se había ganado esta compañía con una licitación en franca lid que le fue arrebatada.

Álvaro Leyva, canciller suspendido. | Foto: Juan Carlos Sierra

La pregunta es si será cierto que con esta extensión de la suspensión de la Procuraduría por otros tres meses a Leyva no se estarán frustrando los planes del Gobierno, que consistían en que terminara la sanción hoy miércoles que era el plazo final. Leyva regresaría a la Cancillería por un término más o menos de un mes para no salir como echado por la Procuraduría y para hacer un empalme con quien probablemente será el sucesor en propiedad de Leyva, el recién elegido vicecanciller, Daniel García-Peña.

Luego, al actual canciller se le entregaría la gerencia o el manejo de la Constituyente que planea o en la que está empeñado el presidente Gustavo Petro, que aún no sabemos si será constitucional o popular, como la llama él y como él lo quiere. Pero este nuevo revés, si eso realmente como todo parece indicar eran los planes, se fueron por la borda, aunque eso no significa que Leyva no pueda ir avanzando en el embeleco de la Constituyente, que según las encuestas, los colombianos definitivamente no quieren.