Suena el segundo Tik Tak de hoy martes 11 de octubre en SEMANA, y suena por los lados de la reunión de emergencia que virtualmente sostendrá hoy el Grupo de los Siete para discutir una estrategia frente a los más de 80 misiles rusos disparados ayer contra la población civil en Ucrania.

El presidente Zelenski les pedirá a los países más ricos, o sea, el Grupo de los Siete, dotar a su país de más y mejores defensas aéreas para evitar ataques del tipo del que devastó a su país el lunes.

Este ataque se interpreta como una consecuencia de las presiones de los proguerra a Putin para que avance más agresivamente contra Ucrania, luego del bombardeo ucraniano contra el puente que une Crimea con Rusia, considerado por Putin un ataque terrorista que, según él, tendrá una fuerte respuesta de los rusos, y ya la empezamos a ver.

El Grupo de los Siete está compuesto por Gran Bretaña, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón y Estados Unidos. Es decir, es una reunión cumbre la que habrá hoy. Los ataques contra la población civil, que se ha convertido en el blanco de Putin, y que constituyen graves delitos de guerra y de lesa humanidad.

No obstante, esta arremetida rusa, según The New York Times, un altísimo miembro de la inteligencia británica considera que la preocupación mundial, por encima de la cruel guerra en Ucrania, debe estar más bien sobre la expansión china en el uso de la tecnología para controlar el disenso entre los chinos, por un lado, pero por el otro, por su habilidad para atacar sistemas satelitales, controlar las monedas digitales y rastrear a las personas, lo cual constituye, según este funcionario de la inteligencia británica, una amenaza mayor contra Occidente.

Pero en medio de un mundo tan convulsionado aparece hoy una noticia muy extraña, pero positiva. El acuerdo histórico que lograron unos países tan enfrentados como Israel y Líbano para explotar conjuntamente gas en el Mediterráneo; hasta Hezbolá apoyó el acuerdo, o sea, sí se puede no condenar al planeta a guerras sin fin.

Escuche el primer Tik Tak de María Isabel Rueda de hoy 11 de octubre:

Tik Tak: la SAE o la maldición del narcotráfico

Lo que tiene escandalizado al presidente Petro del desorden existente en la SAE, que administra los bienes incautados al narcotráfico, no es cuento nuevo. Viene desde la desaparecida Dirección Nacional de Estupefacientes, que saquearon desde sus propios funcionarios hasta congresistas.

Suena el primer Tik Tak de hoy martes 11 de octubre en SEMANA y suena por los lados de la SAE, o Sociedad de Activos Especiales, que ha despertado las alarmas del presidente Petro por las irregularidades que él comienza a descubrir en la entidad, pero que ya venían siendo denunciadas desde la anterior administración.

La SAE es precisamente la que maneja los bienes incautados a la mafia, pero es tanto el poder corruptor del narcotráfico, que ni manejar los bienes incautados a los narcos puede hacerse con pulcritud, y cuando el presidente planeaba ceder esos bienes decomisados a narcos y corruptos a los campesinos para quedar adelante en proyectos productivos, supuestamente apartamentos y casas de lujo, tierras, dineros, joyas, arte y otras propiedades.

Hoy no es claro dónde están muchos de esos bienes, en cabeza de quiénes están siendo administrados y hasta si verdaderamente existen, porque se han detectado por lo menos 5.000 bienes no verificados en cuanto a su existencia física y podrían estar registrados solo en el papel. Háganme el favor.

La SAE precisamente se creó bajo el gobierno de Juan Manuel Santos para darle transparencia al manejo de los bienes que quedaban en esa época bajo tutela de la Dirección Nacional de Estupefacientes, que tuvo que ser liquidada porque se la estaban robando, como para variar. Numerosos escándalos de corrupción que incluyeron a congresistas y funcionarios se dieron en ese marco del manejo de bienes incautados a las mafias.

En su momento, el detrimento patrimonial se calculó en más de diez millones de dólares. A lo mafioso hubo que matar, así literalmente, a la Dirección Nacional de Estupefacientes y crear la SEA para entregarle en ese entonces el manejo de 70.000 propiedades, ahora deben ser muchísimas más, y resulta que el remedio tampoco sirvió.

Porque el inventario de activos no coincide con lo que materialmente tiene la entidad y, encima de todo, sobre los que sí existen hay irrisorios avalúos y el 70 % de los bienes ni siquiera está valorado y hasta concentración de depositarios de esos bienes existen; es decir, unas especies de mafias u organizaciones que se dedican a eso, a que les adjudiquen la explotación de sus bienes, muchas veces a cambio de rendimientos ridículos.

Es decir, los narcobienes convertidos en otro botín de corrupción en el país, ¿cómo es posible que ni siquiera se sepa quiénes son los depositarios o administradores de 29.000 bienes? O sea, ¿quién los tiene?, ¿quién los explota?, ¿cuánto recibe por eso? A estas alturas, muchos de los narcobienes incautados no han pasado ni siquiera por el proceso de extinción de dominio y hasta que eso no suceda es muy difícil monetizarlos.

Y hasta siguen en la mira de sus narcopropietarios originales, que acosan a veces hasta a bala a sus actuales depositarios que los administran. Es la maldición del narcotráfico, que no solo corrompe a los demás, sino a sí mismo.