En las últimas horas, el Gaula de la Policía logró capturar a tres hombres que se dedicaban al hurto de vehículos y motocicletas mediante atracos y además a la extorsión de las víctimas, bajo amenazas e intimidaciones.

La captura de estos delincuentes se logró en el barrio Quirigua, al sur de la capital del país. De acuerdo con las autoridades, gracias a la oportuna denuncia ciudadana, el Guala desplegó un operativo para capturar a estas tres personas de nacionalidad extranjera en flagrancia.

Para lograr una de las capturas, uniformados del Gaula persiguieron por varias cuadras a uno de los señalados de la extorsión.

Una de los delincuentes intentó huir pero fue capturado cuadras más adelante | Foto: Gaula

Estos sujetos tenían su accionar criminal en varios sectores de la ciudad, una vez cometían sus fechorías, a través de chats y audios contactaban a las víctimas identificándose como integrantes del grupo delincuencial “Tren de Aragua”, amenazando con desaparecer los automotores si no accedían a pagar 5 millones de pesos y que, además atentarían en contra de sus vidas.

Los tres hombres son conocidos en el mundo delincuencial como alias Cris, Alex y Rulos. Tras las capturas fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación por los delitos de extorsión, hurto agravado y concierto para delinquir.

Por medio de mensajes de WhatsApp, los delincuentes extorsionaban a sus víctimas después de robarlas. | Foto: Gaula

Los tres detenidos fueron cobijados con medida de aseguramiento en centro carcelario.

Cuatro policías fueron capturados por conformar una banda de secuestradores en Bogotá

Un caso de secuestro y extorsión en Bogotá, incluyó, desafortunadamente, a un grupo de policías. Los uniformados hicieron de juez y parte en un caso que dejó como víctimas a tres hombres detenidos en la localidad de Suba. Dichos policías hicieron una millonaria exigencia para dejar en libertad a los detenidos.

Los investigadores lograron establecer, luego de la denuncia de las víctimas, que los uniformados le pedían a los detenidos una suma superior a los 30 millones de pesos, en el propósito criminal de evitar unas supuestas órdenes de captura que tenían en su contra y que de manera directa los enviaría a la cárcel.

Los policías, de acuerdo con la investigación, se inventaron un proceso, un prontuario criminal, para convencer a los detenidos de que sus nombres estaban en una orden de búsqueda y captura por delitos como lavado de activos y concierto para delinquir. La película criminal que se escribió logró convencer a las víctimas de estar en la lupa de la justicia.

Las víctimas estuvieron en poder de los uniformados por casi dos horas, donde los uniformados insistían en la millonaria exigencia y el riesgo de ir a la cárcel si no pagaban por su libertad. En el desarrollo de la investigación fueron las víctimas las que advirtieron cómo ocurrió la detención y la forma en la que hicieron las exigencias de dinero.

Dos mujeres y ocho hombres, entre los capturados por minería ilegal en el Parque Nacional Natural Farallones de Cali. (Foto: captura de video Policía Metropolitana de Cali). | Foto: El País

Los cuatro policías serán presentados ante jueces de control de garantías por el delito de secuestro extorsivo agravado. Se trata de un hecho de extrema gravedad y en momentos donde la ciudadanía hace un reclamo a las instituciones por la situación de seguridad en Bogotá.

Mientras los delincuentes se expanden con absoluta libertad por las calles y restaurantes, este grupo de policías se enquistó en una esquina para detener ciudadanos, construir procesos judiciales y hacer millonarias exigencias de dinero, para evitar supuestas judicializaciones. La Fiscalía investigó y este lunes los policías fueron capturados.

En audiencias preliminares la Fiscalía presentará a los uniformados, entregará a los jueces de control de garantías el material de prueba que demuestra las circunstancias de modo, tiempo y lugar de los hechos, de cómo los policías, encargados de la seguridad en la localidad de Suba, decidieron modificar sus principios institucionales, para conformar una empresa criminal.